joomla visitor
Auditora
Influenza y recesión agravan miseria y desesperanza en México
Buscar Autor o Artículo

PULSE LA TECLA ENTER
Voces Diario
Banner
459
Banner
Posada del Periodista
Banner
460
Banner
458
Banner
457
Banner
456
Banner
455
Banner

Edición 210

MÉXICO, EN EL TOBOGÁN DE LA DECADENCIA

MANUEL MAGAÑA CONTRERAS
 (Exclusivo para Voces del Periodista)

ES NECESARIO QUE, ante la interminable serie de calamidades que aflige el país desde el año 2000, misma que se ha agravado a partir de diciembre del 2006, se piense en la necesidad de una recomposición a fondo de la vida institucional y política en México que nos permita recobrar el rumbo del país para beneficio del pueblo mexicano, en vez de privilegiar a una oligarquía corrupta, ladrona y apátrida  ligada a intereses  fuera de nuestras fronteras.


   NECESITAMOS RECUPERAR la planta productiva mexicana junto con la credibilidad y la confianza en nuestras autoridades.  Urgente es, acabar con la corrupción, la impunidad  y el dispendio del erario nacional que se diluye en los salarios de funcionarios  que son los más caros del mundo, pese a que México es un pueblo pobre.
   No es posible que continúe el desmantelamiento de la soberanía nacional con la entrega de sus recursos naturales a las corporaciones extranjeras afines al Fondo Monetario Internacional (FMI) y  al Banco Mundial  (BM)  y sus apéndices, como los usureros de Wall Street,  que contribuyen a hipotecar el futuro de las naciones, con sus sistemas de préstamos condicionados, incluyendo hasta el “horario de verano”.
   Estamos los mexicanos de la hora presente, en la obligación de emprender el rescate pacífico de la nación mexicana, porque el descrédito nacional e internacional, la frivolidad, la insensibilidad social nos asfixian  y para sanear al país y rescatarlo de las manos de quienes le hacen daño y se enriquecen  desde los cargos de “servidores públicos” que se les ha confiado,  se necesita desechar el sistema neoliberal que es la causa de nuestras desgracias. Sabido es que en materia económica, la tecnocracia no tiene moral.

La influenza y la recesión
 
   Como si no fuera suficiente con todas las calamidades que ha tenido que soportar el mexicano desde las últimas cuatro décadas, el temor y desesperanza se han apoderado del pueblo, al darse a conocer oficialmente, a fines de abril,  la aparición del virus A/HINI, a causa de lo cual, según el secretario de Salud,  José Ángel Córdoba Villalobos, han muerto más de 40 personas en México, sin que hasta la fecha se haya dado siquiera un solo nombre de quienes perdieron  la vida por lo que “amenaza convertirse en pandemia”. La falta de este dato siembra  la duda en la gente. Cabe mencionar que las epidemias que causan mortandad entre la población, se dan, invariablemente, según lo revela la experiencia, en aquellas naciones donde hay grandes sectores de población pobre y no debe olvidarse que en nuestro país, el número de quienes viven en condiciones de miseria extrema y desnutrición suman, aproximadamente,  45 millones de mexicanos.
   La desilusión se vio incrementada, el jueves 7 de mayo, ante la confirmación de lo que antes había negado el secretario de Hacienda, Agustín Cartsens y Carstens; es decir, que México ya sufre la recesión, lo que significa que la economía cayó 7 por ciento, durante el primer trimestre del presente año,  en tanto que se teme que el Producto Interno Bruto (PIB), caerá  4.1 por ciento y la inflación es superior al 6 por ciento. La pérdida de poder adquisitivo  del salario de los trabajadores  continúa y de acuerdo a organismos laborales como el Movimiento Sindical Mexicano, la canasta básica ha sufrido un  incremento del 34 por ciento en los últimos 12 meses. Los ingresos del obrero sólo han “mejorado”, en un 10 por ciento, como promedio.

Endeudamiento sin precedente

   En el marco del ambiente de incertidumbre por la amenaza de la influenza  que ha brotado en México, con mayor virulencia y muertes que en ninguna otra parte del mundo, según los propios datos oficiales,  se informa que a punto de cumplir sus primeros 900 días en el poder el presidente Felipe Calderón, el nivel de endeudamiento de su administración alcanza proporciones sin precedente.
   Datos del Banco de México y de la Secretaría de Hacienda revelan que  la deuda del gobierno federal , contratada en el mercado financiero local, asciende a  la suma  de 2 billones 529 millones de pesos, cantidad equivalente a una  quinta parte del PIB, lo que representa un aumento del 48.5 por ciento en relación al saldo registrado al inicio de la presente administración federal.
   Desde el comienzo del gobierno del presidente Calderón,  se ha contratado en promedio, diariamente,  la suma de 939 millones de pesos, en deuda interna. Al inicio de la primera administración panista, en diciembre del año 2000, la “deuda  pública” que le correspondía a cada mexicano  fue de 23 mil 700 pesos. Ahora es de 40 mil 800 pesos per cápita. Esto, sin incluir el reciente préstamo por 47 mil millones de dólares  procedentes del Fondo Monetario Internacional.
   Al inicio de la administración blanquiazul federal,  la deuda interna fue de 1 billón 702 mil 665 millones de pesos. A fines de abril pasado, llegó  los 2 billones 529 mil 252 millones de pesos. Se le debe hasta el “blindaje financiero”.

Se debe hasta el “blindaje financiero”

   Al llegar al mes 30, la administración calderonista-priísta,  los datos oficiales sobre el endeudamiento externo de la administración federal revelan que  se debe un considerable porcentaje del  “blindaje financiero” que asciende  157 mil millones de dólares.
Este fondo este integrado por  la reserva de 80 mil millones de dólares del Banco de México; el préstamo del Fondo monetario Internacional por 47 mil millones de dólares ; la línea de crédito de la Reserva Federal de los Estrados unidos por 30 mil millones de dólares y 10 mil millones de dólares más por concepto de otros créditos bancarios.
   Los préstamos en la administración calderonista  para superar las contingencias financieras derivadas  de la crisis y la recesión  globalizadora,, son superiores a los otorgados en la época de la presidencia de William Clinton, cuando  la “quiebra” de la administración  de Carlos Salinas, propició la devaluación del  peso, al asumir Ernesto Zedillo Ponce de León la presidencia de la República, en diciembre de 1994.
   Entonces, el apoyo financiero fue de 50 mil millones de dólares. Al producirse la segunda “quiebra” neoliberal en el período del presidente Calderón, la devaluación  “rozó” los 15 nuevos pesos por dólares -15 mil pesos viejos de la época de Salinas-, y los fondos destinados a “blindaje” que “garantiza” el rescate ante la nueva emergencia, no tienen precedente.
   Vamos de mal en peor y la emergencia  generada por la aparición del virus que inicialmente se dijo que era de origen porcino y luego se corrigió y quedó establecido que es de procedencia humana colocado a México en una situación realmente incierta, porque hasta la fecha, son muchas las versiones, entre ellas, las de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que advierte sobre el peligro de que puedan producirse hasta dos mil millones de personas que enfermen en el mundo por ese mal.

El “blindaje” se puede diluir

   En términos generales, la opinión pública está desorientada sobre la forma en que se ha manejado el problema de la influenza A/HINI,  se habla de más de 40 personas muertas, hasta el momento de redactar este comentario y el caso es que el secretario de Salud, José Ángel Córdoba Villalobos, no ha dado a conocer los nombres de las víctimas de la epidemia.
   Esto, en contraste con la severidad  de las medidas sanitarias que ha impuesto a la sociedad, entre ellas, el uso del tapabocas, la eliminación de la corbata en el atuendo masculino, el cierre de más de 35 mil cafés y restaurantes, la recomendación para que no salgan de casa las personas. La disposición de jefe del ejecutivo  de que las brigadas sanitarias puedan irrumpir en los domicilios para casos de enfermos por el virus. Por dicha disposición, muchos centros de trabajo han dejado de laborar y su reincorporación  será un proceso difícil de normalizar.
Han sido tantas y tan delicadas las consecuencias por la disposición del cierre de fuentes de trabajo, igual en teatros, que en cines, salones de baile, centros culturales y deportivos, etcétera, que el titular de Hacienda, Agustín Carstens y Carstens, anunció el pasado 6 de mayo que “el gobierno federal canalizará 27 mil 400 millones de pesos, para auxiliar a los sectores más afectados por la influenza.
Por causas atribuibles a la serie de “improvisaciones” con que se manejó el tema de “la influenza”,  y al deseo de “tratar de medrar políticamente con la situación”, el PRI y el PRD criticaron severamente las acciones encabezadas por el presidente Calderón.

Pérdidas económicas cuantiosas

   Al manejarse la versión de que ”el virus es de origen porcino”, la industria porcícola del país resultó severamente dañada La venta de la carne de  puerco que desplomó. Pérdidas hasta del ciento por ciento se registraron en bodegas  y puestos  expendedores de ese producto, en la Central de Abastos de Iztapalapa. La Unión de Porcicultores, “conservadoramente”, calcula  “por lo pronto”, en más de cinco mil millones de pesos.
   En este renglón el Valle de México fue considerado “zona de desastre”., por lo que se solicito al gobierno federal crear un fondo por la citada cantidad, para hacer frente a los estragos  por la crisis económica y el virus de la influenza”. 
   En la capital mexicana, el cierre de más de 35 mil restaurantes y cafeterías, se estima en más de dos mil 500 millones de pesos. Los productores de flores  de Xochimilco informaron que perdieron más de 400 millones  de pesos por las “dos semanas de debacle”, período durante el cual fueron cancelados pedidos de exportación por más de 20 millones de dólares  Miles de familias dedicadas a dicha actividad, se han manifestado en “virtual estado de quiebra” y demandan ayuda del gobierno federal”.

Sin mesura, daños al turismo

   Al no ser guardadas las proporciones de las versiones oficiales sobre la “pandemia”, cundió la alarma en el extranjero sobre “el peligro de contaminación de las influenza porcina en territorio mexicano”.Uno de los últimos informes  el daño tur{ístico a México, revela que “la Riviera Maya y Cancún tienen 15 por ciento de ocupación hotelera y la isla está vacía”.
   “Cozumel enfrenta una situación difícil, pues su economía depende de los cruceros  que traen turistas y ahora evaden el país. Estimativamente, las pérdidas por este concepto, ascienden a  más de un millón 2000 dólares hasta el momento de redactar este comentario.  Cerca de un centenar de cruceros han desviado su camino, según datos de la administración portuario integral. Cozumel figura como principal destino de cruceros en México, como lo revela el que en el año 2008 recibió 40 por ciento de los dos mil 910 barcos  y de los seos millones 204 mil turistas que tocaron puertos mexicanos. La aviación comercial, según los datos difundidos, ha resultado también sumamente dañada, por la cancelación de vuelos.
   La alarma generada  también golpeó a Baja California Sur y el destino internacional de Los Cabos sufre la cancelación de eventos de pesca, mismos que abarcan los próximos tres meses.  Como el secretario de Salubridad, José Ángel  Córdoba Villalobos manifiesta que “la crisis por la influenza no está superada  y existe el riesgo de que pueda repuntar, lo cual no se puede predecir.
   Por lo que se refiere a la Cámara Nacional de la industria de Transformación, este organismo afirma que han sido contabilizadas pérdidas por más de dos mil 500 millones de dólares en el sector manufacturero,  por los días 2, 4 y 5 de mayo en que hubo suspensión de actividades por “la emergencia” sanitaria. Se demanda al gobierno federal, “el suficiente financiamiento emergente”  para que puedan funcionar las empresas afectadas.
   Hasta el pasado 5 de mayo, la información sobre vuelos cancelados en el Aeropuerto Internacionales de la Ciudad de México señalaba  que en dicho período fueron canceladas 566 entradas y salidas de aeronaves, independientemente de los recorridos con origen de otras naciones, como Cuba, Argentina, China, Alemania, etc. Los daños son incalculables y difícil de prever el monto de los daños ocasionados por el temor de pisar territorio mexicano, de parte de viajeros internacionales que en condiciones normales han vacacionado en nuestros centros turísticos.
   En las decisiones que ha tomado la administración calderonista para evitar la propagación de la influenza,  han tenido el apoyo de Obama, el presidente de EU,  de la ONU y de la Organización Mundial de la Salud.   

Deterioro en relaciones internacionales

   Los daños por la “emergencia” del virus que finalmente se dijo de parte de la secretaria de Salud, es de origen humano, han sido de diversa índole. El presidente Felipe Calderón  al referirse al rechazo de una remesa de alimentos que envió a Haití, comentó que “En Haití no se mueren por la influenza, pero sí por el hambre”, lo cual le ganó críticas  de diputados de la oposición. “Que deje actuar a la cancillería y deje de creer que está salvando a la humanidad”, afirmaron representantes del PRI, del PRD  y de Convergencia.
   La oposición parlamentaria se mostró severa. Camerino Márquez Madrid, vocero del partido del Sol Azteca, expresó con violencia verbal que “el ejecutivo se muerde la lengua. Se ha visto poco serio, ya que no es competencia del ejecutivo entrar en polémicas y al hacerlo, manifiesta que le ha ganado el estrellismo. No le queda juzgar la situación política y social de otros gobiernos. Si no nos gusta que nos califiquen, no hay que calificar. Haití está en su derecho de rechazar  y lo anunció con dignidad”
   Indudablemente, el incidente de mayor magnitud en materia de relaciones con otros países, se produjo con China, ante el hecho de la cuarentena que se le impuso a más de un centenar de mexicanos en territorio chino, por cuestiones de control sanitario, debido a la influenza  que según el gobierno mexicano ya ha cobrado más de 40 vidas.
   Está México en una situación apremiante, debido a los muchos problemas internos que afectan al pueblo de México, entre ellos, la pobreza, la marginación, la desigualdad, el ilimitado enriquecimiento de la oligarquía, la impunidad, etcétera.
   La influenza es un momento de prueba para quienes ocupan opuestos de mando en México. Sin pretensiones de “querer salvar a la humanidad”, sino únicamente de trabajar por el bienestar y el progreso de los mexicanos, porque .para el cumplimiento de este fin es que se dio el voto par que llegaran al poder,  se necesita corregir la serie de “ligerezas” que nunca conducen a buen fin.
   El camino por recorrer, para no reincidir en más resbalones y yerros como los que han sido cometidos, es muy extenso y prolongado, puesto que tanto la Organización Mundial de la Salud, como la Organización de las Naciones Unidas, no descartan que  puedan degenerar la “emergencia sanitaria” en una pandemia que pudiera afectar a un tercio de la población mundial que suma 6 mil millones de seres humanos.
   Tratándose primordialmente de atender en primer término lo que a nosotros nos compete, interiormente, no olvidemos que  el secretario de Salud, José Ángel Córdoba Villalobos   ha dicho, en el sentido de que “la pobreza eleva el riesgo de que se transmita la influenza”.  Y en territorio mexicano, tampoco hay que olvidarlo, hay más de 50 millones de pobreza, algunos en aguda situación de miseria extrema. Para atender esta emergencia, se necesita  de una regeneración a fondo de la vida institucional y política, porque con el modelo neoliberal exento de justicia social, sino el de la redención económica, social y moral, con criterio nacionalista, porque el contubernio PRI-PAN es de consecuencias destructivas.

Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla

 



Comentarios (0)Add Comment
Escribir comentario
 
 
corto | largo
 

busy
¿Quién está en línea?
Tenemos 497 invitados conectado(s)
Noticias
273 Suplemento
Banner
454
Banner
453
Banner
452
Banner
451
Banner
450
Banner