Edición 409

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¡VIVA MÉXICO!

¡VIVA!

Daniel Marmolejo.

Las fiestas patrias celebradas en la circunstancias del COVID-19 fueron inéditas. Tuve la suerte de asistir al Grito de Independencia y al Desfile Militar, ambos eventos sin patriotas en la plancha del zócalo debido a las medidas sanitarias.

LA OBTENCIÓN de la acreditación especial fue un pase único a este memorable evento, entonces preparé mis mejores lentes y cámaras para grabar en video con calidad 6K y, al mismo tiempo, realizar las fotografías que se exhiben en esta edición.

Tanto el 15 como el 16 de septiembre caminé varios kilómetros sin ayuda y con un pesado equipo en la espalda y las manos ocupadas, casi 40 kilos, pero ese sudor sería recompensado por el simbolismo de representar a millones que quisieran estar presentes, tanto mexicanos en el país como en el extranjero.

Previamente a la celebración del grito de independencia y durante el ocaso se extendió una sensación indescriptible en el ambiente, ya que se podían escuchar las voces de técnicos de iluminación, reporteros y los disparos de las cámaras fotográfica sin que la algarabía de otros años opacara este tipo de sonidos.

Una plancha totalmente vacía. Debajo de la bandera monumental se montó un diseño de iluminación que dibujaba el mapa de la república y una llama de la esperanza que cautivaría al público que vería en sus casas la transmisión por televisión e internet.

Poco antes de la aparición del presidente de la república mexicana realicé algunos enlaces con los medios alternativos, desde luego llegué con 8 horas de anticipación y conseguí este ocaso con nuestra amada bandera.

Portaba una hermosa bandera bordada con la que cubrí el tripié de mi cámara y un moño tricolor en un lente telefoto de 600 mm.

Al salir el Presidente de la República portando la bandera y acompañado de su esposa el silencio era impresionante, no hubo el coro de asombro del año pasado que también registré, era un silencio increíble. Las arengas del presidente se acompañaron de un VIVA como respuesta de un grupo de miembros del ejército mexicano quienes se encontraban a los pies del Palco Presidencial.

¡Viva la Independencia!

¡Viva Miguel Hidalgo y Costilla!

¡Viva José María Morelos y Pavón!

¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!

¡Viva Ignacio Allende!

¡Viva Leona Viario!

¡Viva el heroico pueblo de México!

¡Vivan las comunidades indígenas!

¡Viva la grandeza cultural de México!

¡Viva la libertad!

¡Viva la justicia!

¡Viva la democracia!

¡Viva la igualdad!

¡Viva nuestra soberanía!

¡Viva la fraternidad universal!

¡Viva el amor al prójimo!

¡Viva la esperanza en el porvenir!

¡Viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!

La pirotecnia acompaño el Grito de Independencia y durante todo el acto el Presidente de México jamás inclinó la mirada, siempre miró al frente y al cielo, a la bandera monumental.

Lo que se vivió también sacudió los sentimientos del mandatario, en la arenga ¡Viva la esperanza en el porvenir! su voz se desgarró levemente, lo cual evidenció su preocupación y al mismo tiempo su fe en el destino de México y la transformación que él inició.

El 16 de septiembre se vivió el Desfile Militar sin público, con la participación de 671 integrantes de las fuerzas armadas y Guardia Nacional, 15 civiles de instituciones públicas y privadas del país, 81 vehículos, 56 aeronaves, y 66 caballos.

Se realizó un toque de silencio para recordar a las víctimas del COVID-19 donde se guardó un minuto de silencio y de aplausos.

La Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero dirigió un mensaje a la nación.

Se entregaron 58 preseas “Miguel Hidalgo” a médicos, enfermeras e integrantes del sector salud que forman parte del primer frente de resistencia ante el COVID-19, además de una presea Post mórten a la viuda de un médico víctima de la enfermedad.

El espectacular desfile se aprecia en esta selección de imágenes que capturé con lentes de gran alcance.

Las fiestas patrias quedarán marcadas por la pandemia del Coronavirus, la búsqueda urgente de una vacuna, los cientos de miles de enfermos y las decenas de miles de víctimas; desde luego también por el quiebre del modelo neoliberal y la ruptura de las cadenas productivas y de valor en todo el mundo. Pese a todo y en representación de muchos pude estar presente y

gritar junto con el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador

¡Viva la esperanza en el porvenir!