LOS MEDIOS ESTADOUNIDENSES
DESTRUYERON AMÉRICA
Dr. Paul Craig Roberts*
NO PASÓ MUCHO TIEMPO para que Lie Machine, también conocidos como medios estadounidenses, crearan las noticias falsas y la narrativa falsa del “asalto al Capitolio de los Estados Unidos”, el 6 de enero por una “insurrección supremacista blanca”.
Aquí hay un ejemplo de la lectura del fin de semana de Bloomberg el 23 de enero de 2021:
“Las escenas del primer día de la presidencia de Joe Biden se desarrollaron con el telón de fondo de una economía estadounidense devastada, las consecuencias continuas de una insurrección supremacista blanca y un número de muertos por coronavirus que superó los 400.000”. [1].
La narrativa falsa se acepta en todas partes. Es endémico en la prensa mundial. Incluso fuentes de noticias como RT y Sputnik, que se esfuerzan por darnos noticias reales en lugar de falsas mentiras han repetido la historia de la insurrección.
El presidente Trump fue acusado por la Cámara sobre la única base de esta historia de noticias falsas, y ahora debe ser juzgado en el Senado por los mismos cargos de noticias falsas.
Sobre la base de la misma noticia falsa, dos bancos de Florida en los que Trump tenía depósitos multimillonarios cerraron las cuentas de Trump.
Signature Bank en Nueva York también cerró la cuenta de Trump.
Al igual que el Deutsche Bank de Alemania.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, que permitió a Antifa y BLM saquear y quemar Manhattan, rescindió los contratos de la ciudad con las empresas de Trump que administran pistas de patinaje sobre hielo y un carrusel en Central Park y un campo de golf en el Bronx.
La PGA of America votó a favor de quitarle el Campeonato de la PGA al campo de golf de Trump en Nueva Jersey.
Mira esto
Otras fuentes informan que los convenios están evitando sus hoteles y que los acreedores no renovarán los préstamos.
Que las noticias falsas puedan tener consecuencias en el mundo real debería asustar a todos los estadounidenses hasta la muerte.
Observe también cómo la noticia falsa empeora con cada repetición. El 6 de enero, la supuesta insurrección fue por “partidarios de Trump”. Para el 23 de enero, los partidarios de Trump se habían transformado en “insurrectos supremacistas blanco”.
El mundo entero ahora cree en algo que no existe.
Este es un ejemplo de lo que significa vivir en The Matrix. Todo el mundo vive en un mundo falso creado por mentiras repetidas sin cesar por presidentes.
Las mentiras gobernantes son mentiras que habilitan las agendas del establishment al deshacerse de las explicaciones que no pertenecen al establishment y cerrar a los líderes que no pertenecen al establishment. Trump tuvo que irse porque estaba en el camino de las agendas del establishment. Se está dando un ejemplo de Trump como una lección para otros que valoran más el servicio a la gente que el servicio al establishment.
No hay ninguna duda de que Trump ganó la reelección. La evidencia acumulada de fraude electoral es abrumadora. Sin embargo, la máquina de mentiras pudo evitar que la evidencia fuera presentada y examinada. Todo lo que los presidentes dijeron alguna vez fue que “no hay evidencia de fraude”, seguido de “todos los que apoyan el examen de la evidencia son enemigos de la democracia”.
En otras palabras, la democracia es una elección robada. Si protesta por el robo, es enemigo de la democracia.
El 29 de diciembre de 2020, casi dos meses después de las elecciones presidenciales de noviembre y después de casi dos meses de demonización de Trump por decir que la elección fue robada, Gallup Poll informó que su encuesta encontró que Donald Trump había desplazado a Obama como el hombre más admirado por americanos. Mira esto. Sin embargo, el hombre más admirado perdió las elecciones.
El hecho de que una elección presidencial pueda ser robada a plena vista, atestiguado por numerosos expertos y mil declaraciones juradas firmadas, podría pasar sin ser examinado por los medios de comunicación, los fiscales generales estatales y federales, los tribunales y el Congreso, muestra el poder del establecimiento y la impotencia de los medios de comunicación que, lejos de ser gratuitos, están al servicio total del Establecimiento. El público nunca escuchó sobre la evidencia de la televisión, los periódicos o NPR.
El establishment manda
Claramente, en Estados Unidos no existe la democracia. Se robaron unas elecciones y no se hizo nada al respecto. El Establecimiento pudo eliminar a un presidente que no cumplía con sus propósitos y no se hizo nada al respecto.
El pueblo aprendió que su voto no significa nada y, por tanto, no hay democracia. Un gobierno controlado por el establishment no rinde cuentas al pueblo.
Quizás haya un lado positivo. Ha pasado mucho tiempo desde que la política gubernamental sirvió al público. El público aceptó la situación, porque la mayoría de la gente creía que de alguna manera era un resultado democrático. Ahora saben que la “democracia estadounidense” no era más que una máscara para los intereses propios del establishment. Quizás las elecciones robadas sirvan como una llamada de atención para sacar a la población de su despreocupación. Hay indicios de que al establishment le preocupa que así sea, de ahí el nuevo proyecto de ley de terrorismo interno que se utilizará para tipificar como terrorismo la disidencia.
Para aquellos que son adoctrinados por la repetición de los medios de que “no hay evidencia de fraude electoral”, supongamos que esta mentira es correcta. El hecho es que el sistema le ha fallado a la gente. Independientemente de si la elección fue robada o no, 74 millones de estadounidenses según el recuento oficial de votos y 94 millones de estadounidenses según estimaciones de expertos sobre el recuento real de votos de Trump creen que la elección fue robada. Sin embargo, las preocupaciones de estos millones de estadounidenses fueron descartadas de plano como afirmaciones fraudulentas. Los suplentes afirmaron repetidamente que el único fraude era la denuncia de fraude.
Los demócratas, los medios de comunicación y las instituciones establecidas para garantizar una sociedad libre, fallaron totalmente en su responsabilidad de abordar las preocupaciones sinceras de la mitad o más de la población votante. Esto en sí mismo es un fracaso de la democracia, un fracaso del establishment.
Quienes expresaron sus preocupaciones no solo fueron despedidos sino también demonizados, amenazados y castigados como “enemigos de la democracia”.
La lección no puede ser más clara: Enemigos de la democracia son todos los que desafían la explicación controlada.
Estados Unidos ingresa al año 2021 como un país que ha pasado de la lista de democracias a la lista de gobiernos autoritarios y se está convirtiendo rápidamente en un país totalitario en el que la libertad de expresión, la libertad de asociación y el debido proceso son letra muerta Protecciones constitucionales. La Gestapo llama a la puerta, la NKVD llama a la puerta. Han llegado a América.
Nota
[1] Observe que esta es una oración de dos por uno. Bloomberg se enteró de las noticias falsas de 400,000 muertes de Covid en Estados Unidos. Esta cifra proviene de contar a todos los que mueren, independientemente de si son de Covid, como una muerte de Covid. La prueba de Covid produce una tasa muy alta de falsos positivos, exagerando enormemente el número de infecciones. Muchos expertos han señalado esto, al igual que el inventor de la prueba de PCR, pero los sustitutos han mantenido en secreto las noticias. Ahora, la Organización Mundial de la Salud finalmente ha admitido que la prueba de PCR Covid-19 tiene un problema. (Ver: https://tinyurl.com/yyqnp7ms).
*) De Global Research para Voces del Periodista.
