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Los candidatos
del Apocalipsis
HÉCTOR TENORIO
En el Apocalipsis se menciona a los siete jinetes de la destrucción; en la política mexicana se da cuenta de cinco aspirantes cabalgando a su propia inhumación porque esa caballada está flaca a un año de la sucesión presidencial: Andrés Manuel López Obrador considera que la ventaja de Enrique Peña Nieto es un fenómeno publicitario. Para el tabasqueño no significa nada que la encuesta de Univision y la firma encuestadora Parametría, sea encabezada por el gobernador del Estado México, con el 44 por ciento. Por su parte el senador panista Santiago Creel Miranda también le apuesta a las encuestas, en las que por cierto dobla al más cercano de sus contrincantes a la candidatura a la presidencia, y está en segundo lugar a escala nacional. Por el contrario, Marcelo Ebrard Casaubón construye su candidatura apoyado en sus acciones como jefe de Gobierno. Aparentemente no le preocupa que la iglesia lo tenga vetado, considera que los jerarcas están equivocados en su visión del mundo moderno. El senador Manlio Fabio Beltrones cree que antes de elegir un candidato los priistas tiene que construir una propuesta.
Quizás valga la pena hacer un recuento breve de la historia de los presidentes después de 1929, hasta la fecha. Trece de los quince mandatarios antes de ser presidentes fueron secretarios de Estado, pero sólo seis supieron lo que era gobernar sus estados, tres tuvieron la experiencia de ser diputados, dos fueron senadores y uno fue embajador en Brasil y Alemania.
Actualmente, de los cinco aspirantes cuatro han sido gobernadores. Peña Nieto ha sido diputado local; Beltrones ha sido subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, dos veces diputado federal y actualmente es senador de la República. Ebrard Casaubón ha sido subsecretario de Relaciones Exteriores y diputado federal; Creel Miranda ha sido diputado federal secretario de Gobernación, actualmente senador de la República.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), siente confianza en que el 49 por ciento de la gente le dará su voto. A pesar de eso panistas y perredistas consideran que las derrotas recientes del tricolor dejan como lección que no hay invencibles, sus posturas parecen inclinarse por una alianza el próximo año. Creel Miranda asegura que sería un retroceso al pasado que el PRI ganara. Por su parte, Beltrones y Peña Nieto niegan que el ex presidente Salinas de Gortari negociara con el cartel del Golfo, Ambos pretenden crear una cortina de humo para ocultar la postura intransigente del ex mandatario nada se movía sin que el presidente lo permitiera. Los priistas dejaron crecer este tumor que hoy padecemos.
No obstante de figurar en tercer lugar de la encuesta de Univisión y Parametría, Ebrard Casaubón confía que López Obrador respetará el acuerdo para la selección de candidatos. El problema es que el tabasqueños ya se ha adelantado y anda en campaña con el Partido del Trabajo (PT) y Convergencia. Mientras que Ebrad prefiere quedarse con el registro del Partido de la Revolución Democrática. (PRD), con la intención de contender. Además, impulsa un pacto de unidad para el relevo de la dirigencia nacional del PRD, que se definirá en un Consejo electivo el próximo 19 de marzo. Ya recibió contestación: Las corrientes aliadas de López Obrador van contra Manuel Camacho Solís, coordinador del Diálogo por la Reconstrucción de México, a quien acusan de contribuir a debilitar la unidad de los partidos de izquierda. Las grietas, raspaduras, aunque no son tan visibles como en la izquierda, se presentarán en el PRI al igual que en Acción Nacional (PAN), y serán determinantes para el resultado electoral.
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