![]() |
Edición 427 | ||||
Escrito por Enrique Castillo Pesado | ||||
Viernes, 04 de Marzo de 2022 09:18 | ||||
Enrique Castillo—Pesado
¿Cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús dijo: … aun hasta setenta veces siete (O sea, siempre) Los hoteles de Nuevo Vallarta y Punta Mita (Riviera Nayarit; honestamente que deseen cambiarle este nombre al corredor me parece mas razonamiento); España, la mejor colección exposición de Luxor; Del Toro “Reencuentra su alma”; Tout París para Yves Saint Laurent UNA BUENA y mala al mismo tiempo: A pesar de que en los primeros 15 días de vacaciones de enero de 2022 los hoteles de Nuevo Vallarta y Punta Mita (Riviera Nayarit) tuvieron una ocupación hasta del 90%, ahora se dan datos que la visita de los vacacionistas ha disminuido por el tema de Omicron. También estuvieron llegando algunos cruceros no sólo a los mencionados destinos sino también a Los Cabos (donde se ha extendido la delincuencia) y a Cancún, Riviera Maya y Playa del Carmen. Me parece craso error querer cambiar el nombre del destino de Riviera Nayarit. Es un nombre reconocido a nivel mundial. Pero ya saben cómo piensan las autoridades de algunas áreas del país. Creen que todo lo saben. A mí en lo personal, me gustaba ir al resort que me invitaron dos veces (una de mis visitas la organizó Aurora López de Ortigosa). Allí en Punta Mita, mi amiga Cristina Alemán (qepd) solía tener una boutique. No sé si la conserven sus hijos. Tumbas intactas se exponen en el Museo junto al Nilo La conexión Madrid—Egipto no es imposible, pero en pleno siglo XXI, las condiciones climatológicas marcan el camino ---opina mi colega Julián Herrero (Madrid) marcan el camino si de lo que se trata es de esquivar la super tarifa del teléfono. “No me llames por aquí, que el gobierno egipcio nos tiene capados. Mejor por Messenger. Dicen que por aquí todo va mejor en la comunicación, aunque en estos días de tormentas en varias áreas puede haber cortes en algún instante”. Dicho y hecho. Y ahí está Teresa Bedman, la codirectora del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto (IEAE) y del proyecto visir Amen—Hoept Huy, junto al doctor Francisco Martín—Valentín., al otro lado de la pantalla. Morena, muy morena de piel. “No es para menos; tú piensa que empezamos la excavación en septiembre y teníamos 47 grados a la sombra””, cuenta desde Luxor. Pero eso, sumado a la extrema humedad (de la que también so sufro a veces en casa), para Bedman es un día más en el despacho/oficina. Las condiciones de Egipto, las del desierto, son los más habitual para la célebre arqueóloga después de toda una vida persiguiendo secretos de faraones y allegados. Dice que hay más turismo, incluso que antes de la pandemia, y con todo lo qua descubriendo de varias excavaciones en las que todavía sueña con “encontrar alguna tumba real”. Ha encontrado tumbas intactas que ya se exhiben en Luxor. Hubo una vez un chaval nacido en Jalisco Guillermo del Toro nace en Guadalajara, Jalisco (México), y desde niño soñaba con mundos de fantasías lúgubres, casi góticas, e impropios de la realidad soleada y en la marina que lo habían creado. Creo que por la herencia extremadamente católica de su familia, de origen español, o quizá por lo tétrico de un pueblo, el del propio Del Toro, cuyo origen y contexto (narra Matías Rebolledo) tiene que ver mucho con la violencia, aquel chaval se convirtió en un joven inquieto., diferente, con tendencia a lo onírico. Encontró –asegura Rebolledo-- refugio en lo oscuro lo de Lovecraft, los relatos de Charles Dickens y el “locus amoenus” de lo victoriano. Y en un salto y, posiblemente, de esa cultura que también cultivó del video club que mató internet, el ya estudiante de cine se dio de bruces con las películas de Hammer. Aquella cochambrosa productora británica, icono en su momento del terror de la década de los 60 y antes respetado estudio, fascinó al ser humano y transformó al ahora laureado mundialmente director. Sería faltar a la verdad decir que el visionado de “Las novelas de Drácula” (1960) o “La maldición del hombre lobo” (1961) uno puede salir con el Oscar al mejor director, pero en el caso de Guillermo del Toro ayudó bastante. Y tras la rendición de Hollywood ante “La forma del agua” (2017), vuelve a la dirección con “El callejón de las almas perdidas”, nueva versión del clásico de 1947 y, a su vez, adaptación del relato homónimo de William Lindsay Gresham. Así, y en el remake, Bradley Cooper da vida al protagonista, un “vende humos” de manual que se gana la vida como atracción de feria de mentalista hasta que se cruza con Molly (Rooney Mara) y la con la misma horma de su zapato. Y Del Toro ha sabido abarcar los ingredientes del cine negro, incluyendo el crimen, la chica y la pistola: “La idea de la cinta es la de dejar atrás la invención de lo sobrenatural, que siempre proporciona un placer (para del Toro y seguidores) y una recompensa inmediata”.. Y el creador de “El laberinto del fauno” acepta que dicha cinta requirió herramientas variadas. Así, y gracias a unas de nueva fantásticas Cate Blanchett (una de mis actrices favoritas) y Rooney Mara (juntas por primera vez tras “Carol”), “El callejón de las almas perdidas” no es una sola lección más de la construcción del realizador más ducho en la materia del panorama actual. Parte de su dirección es crear unidad narrativa entre vestuario, decorado o luz. Y Del Toro nos da una pequeña cátedra: Molly es el único remanente del color rojo en la segunda parte del filme neoclásico. Stanton cambia de trajes, siempre a mejor, pero arrastrando consigo corbatas grotescas. Y para finalizar con Del Toro, él apunta “es muy pronto para dar por muertos a los cines. Hasta dentro de un par de año no saldremos de dudas”. Y ni qué decir de otros mexicanos galardonados como Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón, Chivo Lubezky, Guiillermo Arriaga, Salma Hayek, Gael García Bernal Diego Luna, Yaliza Aparicio, Eugenio Dérbez, México suma en Hollywood y en el mundo, como en otra época lo hicieron Ramón Novaro, Ricardo Montalbán, Pedro Arméndariz padre e hijo; Anthony Quinn, Katy Jurado, Dolores del Río, etcétera. Tout París para el diseñador más elegante de Francia Solía ir mucho a París al Plaza Athénée, Bristol, Ritz, entre otros hoteles de la Ciudad Luz, pero en tres ocasiones fuí con Paco Ignacio Taibo y Maricarmen Mahojo de Taibo (la columna vertebral del clan Taibo). En una ocasión que llegamos al Plaza Athénée de París, el director Franco Cozzo me dijo que deseaba que nos hospedáramos en la calle de atrás –Rue Cambon-- donde contaban con varios pisos—suite. En una ocasión, Taibo II se levantó temprano y ya arreglado, subió una cortina y vio frente a él --en otra ventana de otro edificio pegado al nuestro-- al diseñador Yves Saint Laurent. Aún sin conocerse, el diseñador se estaba poniendo un gazné y Paco le hizo la seña de lejos de que le gustaba. Al día siguiente, se sorprendió el escritor hispano/mexicano de que el diseñador le hubiera enviado a su suite una caja con corbatas y varios gaznés de obsequio. Pero para terminar ya esta entrega, el Louvre, el Pompidopu, el Musée National Picasso, el Musée d´Arts de Paris, el Orsay, y el Musée Yves Saint Laurent unieron infraestructuras y esfuerzos para redefinir la geografía de París a partir de las creaciones de YSL de origen argelino. Saint Laurent siempre se inspiró en un gran número de pintores y siempre creyó que el arte no solo forma parte de la cultura, sino también de la vida. También fue un gran coleccionista y en sus espacios contaba con obras de Picasso, Mattise o Mondrian. Algunos de sus más celebrados diseños adaptaron los bodegones cubistas y los rombos de los arlequines de Picasso, así como los pájaros que Braque introdujo en su última obra. Y hasta la próxima, ¡abur!
More articles by this author
|