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De los Pazos de López
a los Pazos de Ulises
HÉCTOR TENORIO
Aún en la agonía del gobierno de Ulises Ruiz Ortiz, no se descarta que se desestabilice Oaxaca. A Ruiz Ortiz, se le responsabiliza de los hostigamientos, persecuciones y asesinatos en los últimos dos luchadores sociales. Que como práctica caracterizó su administración desde el inicio. El asesinato contra Catarino Torres Pereda, dirigente del Codeci, el pasado 22 de octubre a las 15 horas, en la ciudad de Tuxtepec, y el asesinato de Heriberto Pazos Ortiz, máximo dirigente del Movimiento Unificador de Lucha Triqui (MULT), y fundador del Partido Unidad Popular (PUP), ocurrido al día siguiente, en las inmediaciones del Rosario, en la capital del estado, encienden los ánimos de los grupos en conflicto complican la solución de las problemática que se presentan en distintas zonas del estado.
Su administración deja una estela de sangre e Injusticia. Resulta indignante como se han acumulando más muerte de luchadores sociales, pecado que nadie ha investigado, castigado y culpado, prevaleciendo la Impunidad como única respuesta de instancia de parte de los que dicen que gobiernan la entidad, corazón del sur.
Los grupos agazapados que están detrás de los asesinatos de los luchadores sociales, sin duda mandan el mensaje de intimidación para la próxima administración, creando un ambiente de ingobernabilidad. La próxima administración tendrá que lograr la restauración de Justicia para restablecer la paz social. Deberá poner alto al estilo de corrupción y a la impunidad. Gabino Cué Monteagudo, dice que se encargará de esclarecer los crímenes. Ya que esta situación es una advertencia para los luchadores sociales.
El Movimiento Unificador de Lucha Trique, ha Iniciado una serie de actos que van de la toma de edifico gubernamentales y de carreteras a la posibilidad de estallar una huelga de hambre masiva hasta que encuentren a los culpables. Se pretende que organizaciones sociales de como el Frente Popular Revolucionario (FPR) y la Asamblea de los Pueblos Populares de Oaxaca (APPO) se sumen a las actividades de protesta. Los inconformes exigirán además el esclarecimiento de la muerte del hijo de Juan Pablo Zamora, dirigente del Consejo Indígena de Uxpanapa, que se encuentra impune. No parece suficiente que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) detuviera como presuntos implicados en el homicidio de Heriberto Pazos Ortiz, a sus dos guardaespaldas y a un militante de la organización.
Ulises Ruiz Ortiz
A este ambiente de guerra civil, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), echó abajo la reforma aprobada en julio pasado por la mayoría priísta en el Congreso de Oaxaca, sobre la conformación de la Junta de Coordinación Política, que le garantizaría el control de la legislatura próxima, dadas las inconsistencias en la votación la mediante la cual el Partido Revolucionario Institucional (PRI), aprobó la reforma, así como el hecho de negar su discusión en comisiones.
Consecuentemente, la SCJN dio curso a una demanda de acción por inconstitucionalidad presentada de 14 diputados del Congreso del Estado. Mediante esa reforma, el PRI eliminó la Gran Comisión como órgano de gobierno del Congreso y conformó la Junta de Coordinación Política, misma que entraría en vigor en la LXI Legislatura que inició que funciones el 13 de noviembre. Dicha junta estaría encabezada por un integrante de la fracción parlamentaria mayoritaria en el congreso local que en la LXI Legislatura corresponde al PRI, y sería este el encargado de presentar ante el pleno las propuestas de quienes ocuparían el cargo de tesorero de oficial mayor. Ulises Ruiz tiene los pazos contados.{vozmeend}
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