A FUEGO LENTO
ENRIQUE PASTOR CRUZ CARRANZA
El binomio corruptor
“Cuando más atrás puedas mirar, más adelante verás”
Winston Churchill
Una agradable tarde del mes de febrero del año en curso, recibí la invitación amablemente perversa para ser testigo presencial, en el moderno Centro de Convenciones de Ciudad del Carmen, de la nueva relación Pemex-Campeche con la firma del acuerdo marco , convertida en pacto histórico, donde se presagiaba la reconstrucción de un binomio propositivo y constructivo, para rendir muchos frutos de este maridaje caracterizado por traiciones, mentiras, fraudes, abusos, tráficos de influencia, impunidad y asociación delictuosa de “beneficio mutuo” desde 1974 ,hasta que la depredación y el saqueo extinga el recurso no renovable del petróleo en nombre de la patria, el pacto federal, poderes fácticos y sus parásitos de tercera generación, celebrando faraónicamente el bicentenario plural-tartufo perfecto.
El escenario no podía ser diferente al convocado para singular evento de purificación a tantos malos entendidos, reproches por pillerías compartidas u otros pecados de ambición o corrupción, donde el insoportable derrochador y vanidoso director general de la empresa energética Juan José Suárez Coppel arribó acompañado del gobernador de Campeche, Fernando Ortega Bernés; el titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón (quien se autoproclamó defensor honorífico del pacto), el líder del sindicalismo oficial petrolero Carlos Romero Deschamps y, como estandarte de zalamería y homenaje a la “siempre fiel” mansedumbre aldeana con el centralismo, el célebre ex burócrata de todo Rafael Rodríguez Barrera. Nadie me lo platicó, ahí presencié con un aplomo (que hasta me sorprendió) los vibrantes y fraternales discursos del: “ahora si estamos unidos como hermanos; nada podrá separarnos del crecimiento sostenido y el desarrollo tan largamente postergado; en este pacto no hay lugar a la desconfianza, ni menos al reclamo; ¡olvidemos los robos del pasado y construyamos los del futuro!”… Un acto puro y acorde a los tiempos democráticos, éticos y morales del PRIANRED. Se vaticinaron -en apologéticas crónicas y sesudos análisis por encargo- nuevos tiempos, considerando a los desconfiados o críticos de las tropelías de la paraestatal, auténticos enemigos de la nueva grandeza del pacto y simplemente, desadaptados sociales condenados a quedarse al margen del progreso y las glorias que se escribirán con letras de oro en los once Campeches.
Sin querer retornó a mi mente aquel anuncio similar de firma y festejo, cuando en vísperas de la elección del 2006, la misma paraestatal, convertida en “secretaría de elecciones a favor del proyecto Mouriño-Calderón-Partido Popular español” entregaron el 2 de febrero del año electoral, la jugosa cantidad de 710 millones de pesos al entonces segundo gobernador del Trife Jorge Carlos Hurtado Valdez, con el garlito de estar destinadas a obras, proyectos, programas de apoyo a campesinos, pescadores, ciudadanos y todo aquello que tuviera credencial de elector, para garantizar la solvencia en votos cautivos. De aquel dinero, como las posteriores entregas hasta llegar al pastel de 600 millones de pesos que recibió el siempre alegre ex gobernador JCHV, aportaciones recibidas del Corporativo de Desarrollo Social de Pemex, bajo el mando de la campechana Yolanda Valladares Valle (actual titular del FIDE y factor vital en el proyecto para posicionar mediante actos de apoyo a damnificados con enseres domésticos eléctricos para el clientismo electorero a favor de “Margarita presidenciable 2012”) y que, según la revista Fortuna No. 73, del 15 de febrero, en su sección “Empresas” denuncia, la existencia de una investigación vigente en la Secretaría de la Función Pública : INV.ADMADE/028/2008/NA/036 para saber en qué se aplicaron estos millonarios recursos que, para desgracia de los involucrados, no se puede atribuir a las consecuencias derivadas de ningún ciclón o fenómeno natural, que no sea la tradicional podredumbre de todos los ejecutivos estatales, de la empresa petrolera desde José López Portillo, creador de la máxima “la corrupción somos todos”, hasta el increíble robo histórico de excedentes petroleros que, según datos que en reportaje de la revista Proceso aporta el maestro Arturo González de Alarcón, podría superar en el gobierno saqueador de Vicente Fox Quesada y los dos primeros años de Felipe Calderón (adicto a los subejercicios y los hoyos negros financieros que son los fideicomisos) la colosal cantidad de ¡un billón de pesos!
Siento mucho coraje de no haberme equivocado, respecto de las loas de aquel encuentro casi celestial en la Isla del Tesoro Petrolero. ¿Podía ser diferente a los tiempos cuando los depredadores que dominaban la actividad petrolera en México despreciaban las leyes, los acuerdos y los derechos primigenios, laborales y humanos? ¿Qué podemos esperar de un Pemex secuestrado desde el año 2000, por los intereses globales y donde la mano que decide, manda y ordena es el patriarca español Carlos Mouriño y nuestros gobernantes “legales” son sus lacayos? ¿Para esto, Lázaro Cárdenas del Río nacionalizó el petróleo, mientras las fuerzas retrógradas respondieron con la creación del PAN, y gracias a sus aliados del PRI y PRD están ganando al nacionalista michoacano, con la involución de festejo bicentenario?
Rechazo como representativa, la indigna respuesta del gobierno del estado de Campeche, por conducto de la titular de Ecología Evelia Rivera Arraiga, quien, ante el reclamo de pescadores, y grupos afectados por la cerrazón de la paraestatal, aunado a los efectos del reciente accidente en el pozo UECH -32, la restricción de 60 mil kilómetros cuadrados de mar a la pesca, la contaminación y consecuencias aún no determinadas del Ixtoc, el Usumacinta, que se encubren los efectos de su derramamiento con la complicidad de PROFEPA, Marina, Semarnat y gobiernos de los estados de Campeche y Tabasco cuando la dama responde con reproche a los demandantes e inconformes: “No podemos seguir golpeando a Pemex, mucho menos cuando le estamos pidiendo recursos” .
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