 THE ALBATROZ SEAFRONT HOTEL
¡Cascais- resort: Una atmósfera confortable! ENRIQUE CASTILLO--PESADO
DESPUÉS DE UN LARGO VIAJE, lo primero que se necesita es darse el placer de descansar. Por ende, me desplacé hacia Cascais, un sitio espectacular ubicado a tan sólo 25 kilómetros de la capital portuguesa.
¿POR QUÉ EN ESTE SITIO? Me cuestionaron algunos amigos, a quienes les comenté que la idea surgió después de una serie de conversaciones con el embajador de Portugal en México, João Caetano da Silva. João me aseguró que había un lugar idílico en la costa portuguesa. Y, finalmente, me convenció para conocer el glamour (como el que se ve en Estoril y Lisboa), cerca del Océano Atlántico, donde existen extensas playas de arena dorada que integran una maravillosa zona turística. Es una garantía viajar a Portugal. Ahora acabo de tener nuevamente la oportunidad de pasar una semana por el Distrito de Lisboa.

El origen del Albatroz Seafront Hotel fue gracias a la idea de restaurar una casa señorial del siglo XIX y a la que posteriormente le fueron agregando más casas por la zona de la playa, quedando ubicadas en el mejor lugar de Cascais, Portugal con la mejor vista hacia el mar. La remodelación se hizo todos los cuidados posibles hasta lograr la transformación con que ahora cuenta y dándole la imagen de gran hotel--boutique de lujo. La atención es excelente, el ambiente se hace único y es donde se puede disfrutar de un alojamiento con todo un servicio profesional.

Al día siguiente de mi llegada a la también conocida Costa del Sol portuguesa (me hospedé en el Albatros Seafront Hotel) realicé un tour por la zona, encontrándome con el lujoso Puerto de Cascais, que tiene una capacidad más de 600 embarcaciones. Me dio la impresión de que las autoridades de Cascais están poniendo atención al cuidado del medio ambiente por la cantidad de jardines —muy bien cuidados— donde la gente acostumbra caminar para disfrutar de las hermosas vistas que tiene el lugar. Además, de un sinnúmero de apartamentos, hoteles, chalets, etcétera, que son ideales para la gente que tiene el deseo de tomar unas vacaciones en una ciudad que tiene una imagen cosmopolita, ¡y vaya que sí lo es¡
Algunas investigaciones señalan que la zona de Cascais fue habitada desde la era prehistórica, esto como resultado de una serie de excavaciones arqueológicas. Todavía se conservan algunos testimonios que formaron parte de la época romana, así como de la invasión de los árabes. Ya se podrán imaginar la riqueza cultural e histórica con la que cuenta este espacio de Portugal. Según cuentan, la familia real portuguesa pasaba los veranos desde 1870 por lo que Cascais fue adquiriendo el reconocimiento como un sitio interesante para la nobleza y, obviamente, para la aristocracia nacional e internacional. Me enteré que aquí también se realizó en primer juego de fútbol de Portugal, el cual quedó registrado en el año de 1888.

La fama de Cascais creció a un nivel que en la década de los 30 —del siglo pasado--, unida con la Bahía de Estoril, como vecina, era la meca de la sociedad europea de alto nivel y, desde luego, de los viajeros con alto poder adquisitivo. Es posible que Cascais este perdiendo puntos como destino turístico. Esto puede ser atribuible a la presencia de diversos destinos que se han desarrollado últimamente. Sin embargo, no dudo que vuelva a ocupar las primeras posiciones tanto nacional como internacional y el jet--set se esté congregando nuevamente, aunque déjenme decirles que me encontré a Cristiano Ronaldo acompañado de su novia, ya son algunos señales de que personajes deportivos anda por este rumbo. Por allí también estaba de visita José Mourinho. Ambos, entrenador y jugador, son las estrellas del Real Madrid. Me los presentó mi amigo el ex futbolista Luis Figo, el cual me invitó luego a cenar al Bistrot Albatroz de Cascais. Estas personalidades del fútbol mundial por algo se encontraban en Cascais y fue, precisamente, en The Albatroz Seafront Hotel. ¿Será que la plantilla del Real Madrid planea pasar unas vacaciones por este rumbo?

Y es que si hablamos de este hotel--boutique, tengo la impresión que los puede conquistar. Tiene una atmósfera confortable, íntima, servicio personalizado, trato amistoso. Jacqueline Kennedy Onassis consideraba este hotel como su hogar para descansar como si fuera su hogar propio. Sin duda, Jacqueline quedaba impresionada por las maravillosas vistas naturales de la Bahía de Cascais. Aunque debo comentarles que The Albatros Seafront Hotel, además de sur uno de los más lujosos, de los más admirados, pone de manifiesto una de las vistas más hermosas del Atlántico, lo cual es algo imposible de ignorar. Por cierto, el hotel pertenece al grupo de Albatroz Collection, que ya significa un alto prestigio entre el espacio hotelero.
Cada una de las habitaciones tienen su propia alma, la presencia serena del mar vuelve todo formidable. Dentro de las instalaciones, el huésped tiene toda la libertad de marcar el ritmo de la vida que desea llevar durante sus vacaciones. Hay una combinación casi perfecta entre el lujo, la comodidad hasta llegar a la gastronomía. Son 44 habitaciones y 8 suites —decorados de forma individual que ofrecen a los invitados una modernidad total—, cabe señalar que la arquitectura se conserva a través de sus diferentes edificios considerados como históricos que desde el aire ofrecen una vista panorámica realmente estupenda.

Otro aspecto extraordinario que encontré en The Albatroz Seafront Hotel en Cascais, es la gastronomía que ofrece su restaurante. Cuentan con un menú internacional para conquistar cualquier paladar. El bar y la terraza son un lugar perfecto donde se puede disfrutar de los bellos atardeceres reflejados en la Costa El Estoril, que son de las mejores vistas que hay. La invitación queda para no perderse la oportunidad de comer en el Restaurante Albatroz, ubicado en el histórico del Palacio de los Duques de Loulé. Su espacio es elegante y su decoración contemporánea se fusiona con frescos pintados en las paredes. Hay una comunicación perfecta con la terraza y el bar. Y hasta la próxima, ¡abur!
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