Buscar Autor o Artículo


PULSE LA TECLA ENTER

Voces Diario

Banner

459

Banner

Posada del Periodista

Banner

460

Banner

458

Banner

457

Banner

456

Banner

455

Banner

PDF Imprimir E-mail

Ver Otros Artículos de Este Autor

Edición 308
Escrito por Jorge Guillermo Cano   
Lunes, 19 de Agosto de 2013 15:07


¿Educación o adiestramiento?

 

LA DISCUSIÓN SOBRE EL RUMBO, cualidades, condiciones, dinámicas y estrategias del quehacer educativo en México sigue siendo una asignatura pendiente.




 

EN ESTRICTO, la reflexión educativa, en lo que se refiere al fondo, la raíz de los problemas, ha estado casi ausente por no decir ausente del todo (desde la parte oficial, hay que aclarar.) 

 

Dentro de lo limitado del panorama, las propuestas de sectores interesados en la “rentabilidad” del “gasto” educativo (en primera instancia, desde luego, para ellos mismos) requieren de puntual atención por las derivaciones que implican.

 

Para el empresariado mexicano, sin  descargo de sus lagunas conceptuales, las destrezas de la llamada “cultura laboral” (que, por cierto, si de atenerse al término en su acepción más ortodoxa se trata, no se ve por parte alguna) y la del “emprendimiento” (también con una cierta carga ocultista) son las deseables en la relación educación-trabajo o formación-producción, la visión pragmática del aquí y ahora (de la ganancia) que distingue al capital en todas partes.

 

Destrezas, para la maquila


Esa percepción es coincidente con la que sustenta el Banco Mundial para los países en desarrollo quienes (sostiene el BM) deben otorgar “prioridad a la educación básica, principalmente a la instrucción primaria, por ser considerada el nivel educativo que se orienta a la disminución de la pobreza en vista de que, según el organismo, aumenta la productividad y flexibilidad de la fuerza de trabajo debido a la enseñanza que en ella se imparte: el manejo del lenguaje, las matemáticas y el desarrollo de habilidades para la resolución de problemas”, como enfatiza Elena Zogaib.

 

Pero más allá de una vinculación que no es marginable en sí, de lo que se trata es de reorientar a la educación para que sirva a la empresa privada en una economía de mercado. Desde luego, esa reorientación define los parámetros emergentes y, particularmente, precondiciona los juicios respecto a la (buena) calidad y el liderazgo educativo efectivo, o deseable, en el contexto de la globalización.

 

Lo que diga el banco


Además, y de evidente relevancia, está la derivación de corresponsabilidad (que rápidamente, desde la patronal y sus epígonos, se convierte en responsabilidad, a secas) hacia las Instituciones de Educación Superior (IES), especialmente las públicas, que son cuestionadas “por no responder” a los reclamos del sector productivo.

Sobre lo que se entiende por calidad de la educación, apunta Zogaib, hay plena coincidencia entre el BM y el gobierno de México: “en ambos puntos de vista, la calidad educativa significa un tipo de instrucción que esté a la altura de los cambios mundiales”.




 

Pero lo que no queda claro es cómo, a partir del énfasis en el mero adiestramiento, la dotación de los conocimientos y las habilidades mínimas suficientes para insertarse en el mundo del trabajo (respondiendo a nuevas exigencias de capacitación, ciertamente) se podrá desarrollar “la capacidad de respuesta” frente a los avances científicos y tecnológicos y sus implicaciones en la competencia internacional.

 

¿Cómo en la fábrica?


En esa óptica, la calidad se remite a la capacitación para resolver problemas inmediatos y concretos, a partir de un aprendizaje directamente vinculado y, más aún, correspondiente a las exigencias del “sector productivo” (que se reduce sin más, y de manera casi única, al sector empresarial privado.)

Las directrices del BM, aunque casi siempre se presentan como indicativas (esto es, no obligatorias) han sido objeto de fundadas críticas. De entrada, se apunta que distorsionan claramente los paradigmas del desarrollo educativo, de su lógica interna, al magnificar la correspondencia con las tendencias neoliberales, dando a la educación un enfoque meramente economicista.

 

Con dedicatoria al “tercer mundo”


En cuanto al énfasis en la instrucción primaria y la adquisición de habilidades para una adecuada inserción en el mundo del trabajo, Pablo Latapí observa que “por estar enfocados en hacer avanzar la globalización económica, sus propuestas (del BM) llevan implícito un propósito de distribución internacional del trabajo que asigna a los países más débiles y dependientes patrones de desarrollo subordinados de crecimiento, y en sus diagnósticos y recomendaciones se encuentra la idea de que dichos modelos de crecimiento requieren desarrollar en los trabajadores sólo destrezas instrumentales y adaptativas, en vez de capacidades creativas y críticas”.

 

¿Humanidades? ¿Para qué?


De esa manera, la perspectiva empresarial de la calidad y el liderazgo aplicada a la educación parcela de entrada sus alcances, al tiempo que prefigura sus características en función de propósitos de parte, usando en su beneficio planteamientos de superación general.

 

Un tema aparejado a las consideraciones anteriores es el de la estandarización educativa que sería objeto de otro tratamiento. Sin embargo, y para cerrar este punto, creo conveniente rescatar la advertencia de Ignacio Ramonet cuando señala que en la actualidad, con la entronización de los criterios del marketing en la cultura “las obras demasiado originales y demasiado personales reciben muy poco estímulo” y éste “se orienta hacia las sensibilidades medias que se apoyan en valores indiscutidos y que repitan hasta la saciedad lo que todos admiten sin resistencia alguna”.

 

La advertencia es del todo pertinente para el tratamiento, y la puesta en perspectiva, de los reclamos de adecuación que, desde la visión empresarial, se  le hacen y enfatizan cada vez más al quehacer educativo en general.

 

Reclamos que han ido más allá al cuestionar la pertinencia de las humanidades en los programas de estudio y pedir su desaparición, incluso.

 

¿Quo vadis, SEP?


En ese entramado de exigencias de correspondencia que se inscriben en adecuaciones mecánicas, la Secretaría de Educación Pública no parece contar con propuestas nacionalistas, endógenas, con base en el interés general de la nación.

 

Los especialistas del ramo, años ha, han venido insistiendo en la necesaria apertura de un debate nacional sobre el rumbo y sentido de la educación, en general, y de los alcances de su función designada en un contexto de limitaciones y presiones exógenas.

 

El silencio sobre lo toral (sin descargo de la fraseología superficial que manosea sin reservas los valores e intereses de la nación) pero sobre todo las determinaciones unilaterales, en la práctica, han caracterizado la conducta de quienes conducen el aparato educativo mexicano.

Y en ese, como en prácticamente todos los rubros de la vida nacional, la actoría social es desplazada.

 

Negocios son negocios


A otro tema: investigaciones recientes revelan que detrás de la persecución de inmigrantes ilegales en Estados Unidos hay un gran negocio.

 

El promedio anual de detenciones en los últimos años es de 400 mil, que son recluidos en cárceles privadas, principalmente de las empresas Corrections Corporation of America (CCA), The Geo Group y Management and Training Corp.

 

Cada preso le cuesta al gobierno de Obama 122 dólares diarios, así que criminalizar a la inmigración ilegal es una buena fuente de ganancias para esa privada iniciativa del “otro lado” que, gracias a ello, ha incrementado ciento por ciento sus utilidades anuales que llegan a los cinco  mil millones de dólares.

 

Tamborazos


-En Sinaloa, los jefes policiacos que reprueban los exámenes de control de confianza pueden seguir sin problema alguno, mientras los gendarmes de a pie son corridos de la chamba ipso facto: Mario López dixit.

-En circulación nuestro libro El Mensaje, de relatos y aforismos. A ver a dónde llega ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla ).



More articles by this author

APUNTE México: el modelo, empresarios y las calificadorasAPUNTE México: el modelo, empresarios y las calificadoras
APUNTE México: el modelo, empresarios y las calificadoras Jorge Guillermo Cano Y están...
APUNTE Tiempos de GomorraAPUNTE Tiempos de Gomorra
  APUNTE Tiempos de Gomorra Jorge Guillermo Cano Ni caso en reseñar las múltiples...
Comentarios (2)Add Comment
0
J. M. Arredondo
agosto 31, 2013
187.243.225.233
Votos: +1
Para la reforma

Cierto. El gobierno nunca ha planteado una discusión seria, abierta, incluyente y democrática, para generar los acuerdos que necesita la educación mexicana, que es un desastre. Bien, señor Cano.

0
J. M. Arredondo
agosto 31, 2013
187.243.225.233
Votos: +1
La contrarreforma

Cierto, el gobierno nunca ha planteado la discusión abierta, incluyente, democrática, que se necesita para generar acuerdos en favor de la educación mexicana, que es un desastre.

Escribir comentario
 
 
corto | largo
 

busy
 

Compartir

 

¿Quién está en línea?

Tenemos 251 invitados conectado(s)

Noticias

273 Suplemento

Banner

454

Banner

453

Banner

452

Banner

451

Banner

450

Banner