Jueves, 10 de Octubre de 2013 10:09 | 
Author: Enrique Castillo Pesado | 
| Edición 310 |
Venecia—Italia
desde el Silversea Spirit
“Señores: llegamos a Venecia”. Después de unos días de navegación por el mar a bordo del Silversea Spirit (uno de los cruceros más lujosos del orbe), el desembarco final fue en la ciudad del ambiente cultural, de la serenidad y el movimiento constante del turismo, de la historia. El arribo a la ciudad conformada por 118 islas pequeñas que están unidas por 455 puentes como el famoso puente de la Libertad.
Es la entrada a Venecia y desde cualquier punto se observa el avance de los vaporettos, el transporte público navegable de la ciudad que va por los canales en lugar de carreteras. Por cierto, al cambiar del crucero al vaporetto, el operador me comentó --con singular alegría-- la breve historia de este tipo de transporte que inició con el “Regina Margherita”, en 1881.
La perspectiva de llegar a Venecia, hace que la mente construya imágenes que se transforman en reales desde una plataforma navegable como el crucero. Estas imágenes son la proyección de una ciudad maravillosa de inmenso acervo cultural, de su historia milenaria la cual tiene la distinción de ser Patrimonio de la Humanidad, otorgada por la UNESCO. Es el encuentro con la legendaria fama que tiene como referencia ser parte del origen de la pintura europea, o bien, el acercamiento con la riqueza de su arquitectura. Aquí se habla de los pintores, arquitectos y artistas; nombres como el de Gentile Bellini, Francisco Guardi, Giovanni Bellini, Tiziano, Giorgione, Tintoreto, etcétera. Muy pocos saben que Antonio Vivaldi nació en Venecia. No cabe duda que Venecia tiene su propia pujanza de atracción.
Entre cada una de las atracciones, relacionadas con el entretenimiento musical, esta el famoso teatro La Fenice, es uno de los teatros de ópera más famosos del mundo. Es el sitio donde se han estrenado gran cantidad de óperas italianas que ya tienen un reconocimiento por este género y como curiosidad les digo que Salma Hayek y Francois-Henri Pinault eligieron este coliseo como sede de la cena de bodas en el 2009.
Venecia también tiene su Carnaval, la festividad que fue declarada como oficial en el siglo XIII y su esplendor lo alcanzó en el siglo XVIII. Este festejo ha tenido la peculiaridad, desde su origen, de ser el centro de reunión de viajeros y aristócratas de toda Europa, de la gente que esta en la búsqueda del placer y la diversión. Sin embargo, como luego llega a suceder, Venecia entró en una situación decadente y fue perdiendo su poder mercante y militar. Después de este proceso, inició la fase de recuperación para darle vida nuevamente al Carnaval a finales del siglo XX y la ciudad se vio invadida de miles de turistas con el deseo de ser testigos de la enorme fiesta y de disfrutar el placer de recorrer sus barrios y de gozar, por supuesto, de la gastronomía con platillos como el pescado del mar Adriático, las gambas, calamares, cangrejos de Murano o las sardinas. Hay restaurantes que saben el secreto de la preparación veneciana del Carpaccio con queso parmesano, hígado a la veneciana, arroz a la pescadora, y los exquisitos y típicos helados de la zona del Véneto. Hay quienes les agrada refrescarse con la bebida popular de la zona: el spritz, el crodino, el prosecco, el Bellini, el Bussulaio el sgroppino, algunas de las bebidas típicas se combinan con alcohol.
La Plaza de San Marcos, leyendas y la Regata
Es “el salón más bello de Europa”, así lo dijo Napoleón Bonaparte al hacer referencia de La Plaza de San Marcos que luce esplendorosa con la fachada de la basílica de San Marcos, el Campanile de ladrillo, el Palacio Ducal, la Torre del Reloj, edificios de delimitan la plaza, asimismo se dejan ver las llamadas Procuradurías Viejas y Procuradurías Nuevas, sus fachadas se distinguen por los arcos continuos. Los últimos dos edificios eran la sede los procuradores y magistrados responsables de la conservación de la basílica. Ambas procuradurías fueron construidas en el siglo XV y XVI. La Basílica de San Marcos se afirma que es una obra maestra de la arquitectura bizantina en Occidente, fue construida para guardar los restos del Evangelista Marcos que fueron traídos de Alejandría.
Otro de los puntos de interés el Palacio Ducal, edificio con un estilo de la arquitectura gótica, sus dos fachadas más visibles miran hacia la laguna de Venecia y la Plaza de San Marcos. Fue sede los Dux, del gobierno, de la corte de justicia y prisión de la República de Venecia. Ahora estos edificios son de los más visitados y fotografiados por los visitantes y sobre todo por los estudiantes de arquitectura de diversas universidades, que también gustan de escuchar de leyendas como la de “los condenados a muerte” o la del “cambio de color” del Palacio de acuerdo a la luz del día.
Uno de los eventos que tuve la oportunidad de ver, fue la Regata Histórica que se realizó el pasado 1 de septiembre. Se trata del espectáculo principal de remo de este mes que se practica desde hace cientos de años en la laguna de Venecia. Los gondoleros tienen una participación relevante porque visten con trajes de la época gloriosa del pasado. La competencia de divide de acuerdo a la edad y el tipo de barco. Todo se transforma en un escenario flotante y espectacular. En esta ocasión, las autoridades diseñaron una estructura flotante para utilizarla como gradas para los espectadores que tuvieron el placer de pasar un rato agradable en la regata.
Para complementar las actividades culturales en Venecia, diré que su territorio continental tiene guardado una riqueza histórica distribuida a través de los museos, los palacios, las iglesias, las famosas islas de Murano y Burano. Es fantástico pasar por las villas a lo largo del río Brenta y contemplar los maravillosos paisajes de la zona Miranese y, por supuesto, las no menos famosas islas de la Laguna de Venecia. Y hasta la próxima, ¡abur!
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