PARA QUE LO ESCUCHEN HEREDEROS DE LA JUNTA DE NOTABLES
Esto ya comenzó:
¡Nadie lo va a parar!
ABRAHAM GARCÍA GÁRATE
Gobierno o individuo que entrega los recursos naturales a empresas extranjeras,
traiciona a la patria. Lázaro Cárdenas del Río
EL CALIS FUÉ EL 8 DE SEPTIEMBRE, con la convocatoria al mitin en defensa del petróleo, lanzada
por Andrés Manuel López Obrador para empezar una campaña en contra de la
privatización de la industria petrolera y la intención de borrar páginas
fundamentales de la historia moderna del México que hace 75 años se llenó de
júbilo y solidaridad al momento en que el general Lázaro Cárdenas del Río, el
histórico 18 de marzo de 1938, hizo
público el decreto por el cual nacionalizó el petróleo como patrimonio del
pueblo mexicano.
Agustín Carstens, tesorero de la Fed.
Ese día -8 de septiembre-, fue invadido,
alegre y multitudinariamente, uno de los espacios más emblemáticos del Distrito
Federal, que condensa nuestra tradición republicana: la Avenida Juárez. Desde
Paseo de la Reforma
-encarnada por Don Benito-, hasta el eje central Lázaro Cárdenas. No lejos, en la Avenida Hidalgo,
al pie de la
Torre Latinoamericana y en el atrio del Palacio de Bellas
Artes, otros miles de compatriotas flanqueaban a los defensores del petróleo
mexicano… Hidalgo, Juárez, Cárdenas, qué triada imbatible, a pesar del
Anti-México.
Los mensajes de López Obrador y de Claudia
Sheimbaum fueron los que más conmovieron a los asistentes, que los escucharon
como preámbulo de la nueva historia que se está escribiendo en México.
Así
llegamos al 22 de septiembre
A pesar de que toda la noche anterior estuvo
lloviendo y que la mañana dominical se pintó de un agrisado frío, la
multitud comenzó a concentrarse en las inmediaciones de la Columna del Ángel. Llegaban
en contingente, en pareja, en familia, en grupo, en bola. Desde las Del Valle, Narvarte, Roma, Condesa, Polanco, Anzúres,
Coyoacán, La Florida,
San Ángel, Los Pedregales, los ríos de ardiente humanidad parecían
interminables.
Venían de Atzcapotzalco, Milpa Alta,
Magdalena Contreras, Iztapalapa, Iztacalco,
Miguel Hidalgo, Venustiano Carranza, Xochimilco, Tlahuác, Benito Juárez, Cuajimalpa,
Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero (no confundirlo con el bárbaro panista),
Coyoacán, Tlálpan, Tláhuac. Frente al símbolo de la Independencia: En este santuario no se discrimina a nadie
por razones de clase, raza, color, sexo, edad, escolaridad, oficio, profesión,
ni modo de andar o de cantar. Llegaron de Baja California, Durango, Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Michoacán, Morelos, Puebla, Jalisco, Sonora, San Luis Potosí, Tabasco, Estado de México, Nuevo León, Nayarit, Colima, Chiapas, Campeche, Yucatán… Por encima de los escombros sembrados en la Patria chica por la despiadada Naturaleza, palpita el espíritu unitario de la Patria grande. Juan, Pedro, Verónica, Karla, Ramona, Elisa, Ivonne, Fernanda, Alejandro, Roberto, Iñigo, Amador, Leonardo, Tania, Gabriel, Hugo, Laila, Antonio, Laura, Lourdes, Osiris, Benjamín, Francisco, Rubén, Paola, Cristina, Ximena, Laura, Luis, Liliana, Roberto, Carlos, Felipe, Elena, Doña Lupita, Don Saúl, Don Chencho, Doña Ignacia, Don Romanita…El Güero, El Negro, El Chino, La Morena, El Prieto, El Pelos, La Chiquis, La Nena, El Champi, El Gordo, La Flaca, El Tentáculos, El Calenturas, La Burbuja, El Apache, La India, La Maravilla, La Ticher, El Fanton, La Yelos…#somosunchingoyseremosmás. A pie, de bastón, en muletas, en silla de ruedas. En patines, en patineta, en bicicleta, en moto. En Metro, en Metrobús, en camión, en autobús. Algunos que pudieron, llegaron en avión. La amenaza del despojo pega más que la penuria.
Los transformadores
Se portaban máscaras, zancos, títeres, mojigangas, atuendos de
luchador, y sonaban mariachi, bandas de viento, redova, tambores y se danzaba
envuelto en trajes típicos de campechanas, veracruzanas, de purépechas, de mazahuas
mexiquenses… Ondeaban banderines y banderas blancas, verdes, rojas, amarillas, tricolores....
Globos de colores diversos y tamaños varios... La Suave Patria
que viste de verbena la solemnidad del motivo.
Morena, PT, PRD, Stunam y más sindicatos
universitarios. SME, CNTE-SNTE, Mexicana de Aviación, técnicos petroleros,
jubilados, El Barzón, UNTA; las generaciones anti-ninis de la UNAM,
Poli,
UACM, UAM, Ibero, CCH´s, #yo soy 132, ceuistas, cegehacheros
ultras y moderados. Ciudadanos anónimos, pero con bandera grande: Defensa
de la soberanía nacional. La causa patriótica convoca a La
tregua de Dios…
Llegaron, porque ahí querían estar: Encendido
ánimo de combate, voluntad y algarabía.
Escudo y lanza en pacífica defensa de nuestros recursos naturales.
Mensaje al todo México y allende las fronteras: El petróleo no se vende/ se
defiende. Para que lo entiendan los del fáctico Pacto por México y los de las Cámaras legislativas: Con
la boca reseca, reseca/ y el cabello erizado, erizado… corretea de la seca a la
meca/ el presunto señor diputado. Ya en la paz del Congreso descansa/
triunfador el señor diputado/ bien repleto el bolsillo y la panza/ y en la boca
fruncida, UN CANDADO. (Renato Leduc dixit).
Los
androides no entienden razones
Sociedad
Civil, los llamaron los del pasamontañas
rebelde en el 94, y dignos se sintieron de hacer historia hace casi dos
décadas. Hoy, dueños del decoro y la firmeza, vuelven a retomar los pasos de
sus antecesores en la militancia: Mucho
más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas (y los
zócalos) de la democracia, por donde pase
el hombre libre… (Cuarenta aniversario luctuoso del prócer Salvador
Allende). Decírselo al Banco Mundial, al Fondo Monetario Internacional, al PRI, a los Salinas de Gortari y sus
entenados. A los tecnócratas armados en el extranjero como desalmados androides;
ávidos, sin embargo, ante el frío y aguado plato de lentejas.
Ben Bernanke, guardián de nuestras divisas.
Recordar nomás a Edmundo O’Gorman: Sobre el 3
de octubre de 1863. (Estamos en el humillado sesquicentenario): “El
archiduque Maximiliano recibe en el Palacio de Miramar a la diputación mexicana
encargada de comunicarle el decreto de la Asamblea de Notables (Nr: abuela del Pacto por México) que lo llamaba al trono de México
(…) José María Gutiérrez de Estrada dijo al archiduque: ‘México, restituido
apenas a su libertad por la benéfica influencia de un monarca poderoso y
magnánimo (Nr: Napoleón El pequeño,
envía a sus representantes a entregar al príncipe de su elección el
ofrecimiento formal de la corona”. (Significado del Triunfo de la Republica. Lecturas Universitarias/ Antología México
en el Siglo XIX. Álvaro Matute).
Poco les duró el gusto a los monarquistas de
melena polveada y danzantes de rigodón: Llegó el Indio de Guelatao a
restaurar la República. Pero
los nuevos reyezuelos negros porfían.
Un minuto de silencio pidió López Obrador por
los compatriotas víctimas de Manuel e
Ingrid. Los que ya pagaron
involuntariamente el tributo, envueltos en la putrefacta mortaja neoliberal. Y
después del elocuente silencio solidario, el retumbante clamor: ¡Esto
ya comenzó. Nadie lo va a parar! Nos vemos el 2 y el 6 de octubre, el
20 de Noviembre… El 1 de diciembre. Sólo las piedras no cambian. México sí.
More articles by this author
|