“El día precedente enseña al día que sigue”
PINDARO

ANTE LAS ACTUALES circunstancias y evidentes señales de un proceso político de sucesión sumamente complicado, cargada de todas las infamias y poniendo en práctica un sin límites de estrategias, donde la ética no existe y la moral se somete al pragmatismo de que “el fin, justifica los medios”; nuestro amado México parece repetir entornos lamentables de odios, crimen, inestabilidad, resistencias caciquiles, delincuencia política, financiera e institucional organizada, en busca de llegar a “La Leonor” para presidir, no una nación con su Constitución, Pacto Federalista e Instituciones, sino una empresa casi en modalidad global de “Outsoursing”, capaz de garantizar magníficos resultados en la rapiña integral, el pulcro e indetectable lavado de dinero en paraísos fiscales y realizar todos los sueños faraónicos de capos de carteles, ministros, presidentes de naciones, gobernadores, presidentes municipales y todo aquel, afortunado en encontrar dentro del —otrora Servicio Publico— la Cueva de Ali Baba y sus interminables ladrones impunes.

Fantasiosos juegos de magia

Muy lejos de cualquier vestigio o conservación de las ruinas surgidas después de la Revolución de 1917 y aquellos “Sentimientos de la Nación” de nuestra Independencia, hoy transitamos dentro de los fantasiosos juegos de magia, virtualidad y drástica realidad inhumana, del modelo neo liberal global, que supera en prácticas, forma y fondo, aquellos dolorosos tiempos de la colonia, la esclavitud , incertidumbre laboral, de los Derechos Humanos y tantas banderas de presuntas organizaciones internacionales “de buena voluntad” y alta carga de humanismo, casi similar a la labor de dominio clerical puesta en marcha por los frailes españoles, para dominar el alma y espíritu de los habitantes autóctonos de América y poder obtener el mayor producto interno bruto, con el sufrimiento humano.

Todo está siendo modificado, destruido, para volver a construir con las mismas piedras los templos financieros y juegos de encantamiento, para desaparecer fortunas públicas en manos privadas en forma legal, ilegal o por simple ejercicio despótico del poder. Las “instituciones” son cual fachadas de set cinematográfico donde se tejen historias de utopía, con libretos de jurisprudencia lunáticas, debidos procesos cantinflescos y “nunca más” que terminan siempre con “más de lo mismo”. Citar un solo ejemplo, sería convertirnos en discriminadores de tantas meritorias historias desde Tijuana y sus célebres “Lomas Taurinas”, hasta el río Suchiate y la indigna conducta criminal contra inmigrantes centroamericanos.

La trasmutación y camuflaje para llegar a donde nos encontramos, vivió su más profunda crisis después del movimiento revolucionario. Dos ejes fueron vitales para definir hechos. El poder total y el petróleo. Un capitalismo mundial en busca de seguir manteniendo sueños propios y fabulas de “destino manifiesto” y otro extremo donde el socialismo pretendía dominar al mundo con todos los recursos a su vez. Nuestra suave patria, bioceánica, geográficamente maldecida por estar más cerca del norte que de Dios y bendecida por sus recursos naturales renovables y no, debía encontrar la ruta de estabilidad, para evitar seguir perdiendo su territorio y conservar a la República.

El “poder supremo”

El crimen político como remedio a cualquier desvío, se vivió desde Francisco I Madero hasta llegar al momento cumbre en el Parque de la Bombilla, con el asesinato de Álvaro Obregón para dar paso a los “maximatos” dentro de un partido hegemónico (PRI) fundado en 1929, el cual encuentra oposición petrolera, global, con la constitución del Partido (apátrida) Acción Nacional a raíz de la nacionalización del petróleo el 18 de marzo de 1938 por el Gral. Lázaro Cárdenas que había logrado desterrar a Plutarco Elías Calles de su papel de “poder supremo”.

Muchos hechos parecieron crear desestabilidad en el tránsito del partido único de lo que definiera, el corrupto e hipócrita peruano renegado y español-borbón Mario Vargas Llosa como “la dictadura perfecta” en su calidad de “troll global monárquico”, evidenciado en su auténtica naturaleza, en las recientes revelaciones “los papeles de Panamá” del ahora “corrupto imperfecto”.

 

 

En mis años de juventud “revolucionaria”, hasta estas épocas de periodista sometido a severas campañas de “la corrupción somos todos”, cayó en mis manos el libro del maestro Manuel Mejido “México amargo” donde conocí la expresión escrita de un gran fracaso del proyecto revolucionario contaminado por la demagogia y la simulación donde los amos y robos son de propiedades generacionales y la impunidad, goza de total y cabal (Peniche) salud. Ningún Estado ha logrado superar las grotescas diferencias.

Es más, se acrecienta la inequidad, con un centralismo insensible y cómplice y cacicazgos de horca, fosas comunes y muchas “comisiones histriónicas de la verdad verdadera.”

Momias vivientes

He aprendido que, salvo muy honrosas excepciones, la mejor historia está en las vivencias de muchos políticos actores del momento, que, en el umbral del Omega realizan un balance de sus actos y reconocen (algunos son necios hasta la sepultura) sus errores.

Los ahora casi momias vivientes y antes integrantes de la denominada clase política parecen emular aquellos lamentos de los viejos mafiosos del Chicago de Al Capone. Ya no se tiene ni categoría, honor, respeto ni calidad en hacer las cosas.

La traición, el crimen, engaño, doble moral y la vileza, se mantienen como méritos supremos en la política global. No estamos -insisto- ante algo nuevo. Es nuestra pobre naturaleza humana vestida de la luz del raciocinio y el arte de la palabra.

Frente a una cálida taza de café frente a mí y con una sudada cerveza clara y una copa de tequila “reserva especial”, recuerdo mi plática con el ex gobernador de Campeche General José Ortiz Ávila quien nostálgico me reveló: “Cuando se dio el nombre de Gustavo Díaz Ordaz como candidato a la presidencia de México, solo dos gobernadores habíamos estado jugándola con él. El de Tabasco Carlos Alberto Madrazo y el de Campeche; es decir yo. No terminaba de leer los comentarios en la prensa confirmando el “destape” cuando sonó mi teléfono en mi despacho. Era Carlos A. Madrazo que me pedía platicar los planes futuros de los dos.

“Mira Pepe, creo que no tendrás inconveniente después de Gustavo yo sea el próximo presidente. Te prometo que tú sigues amigo”. Mejor hacemos las cosas al revés y no dudo que tengas desconfianza de mi palabra. Ninguno de los dos llegamos, siendo boicoteados por otros dos personajes. Luis Echeverría Álvarez y Carlos Sansores Pérez. Echeverría traiciona a Díaz Ordaz y le confirma la responsabilidad de los hechos de Tlatelolco, ante la advertencia a tiempo de su amigo del poblano, el chiapaneco Eduardo Robledo.

Crímenes y “accidentes”

El crimen de jóvenes en ese movimiento de evidente represalia ente la determinación de Díaz Ordaz de cancelar todos los contratos a empresas petroleras extranjeras en México, después del informe de Jesús Reyes Heroles, Director de PEMEX de la riqueza confirmada en aguas someras desde Frontera Tabasco a Puerto Real Carmen Campeche, fueron méritos suficientes para que los tres sectores del Partido hicieran al compañero Luis Echeverría Álvarez presidente. Carlos Alberto Madrazo murió en un oportuno “accidente aéreo” después de intentar obligar la decisión a su favor violentando las reglas internas. Después de una crisis, del crimen a jóvenes, accidentes dolorosos la decisión a favor del “mayordomo de Bucareli” calmó las aguas.

Cada seis años nuestros políticos empresarios depredadores, se acoplan como las plastilinas a su entorno. Un grupo de jóvenes muy agraciados, simpáticos bien elegantes, con el aditamento indispensable de la inmoralidad y falta de escrúpulos rodearon al “compañero Luis”, pero en la SEGOB Mario Moya Palencia, candidato natural, adelantó muchos de estos jóvenes a su proyecto con los consejos de Jesús Reyes Heroles y su aliado Carlos Hank González, entonces impedidos por la Constitución a aspirar la Presidencia de México. Casi resignados otros aspirantes veían el posicionamiento de los muchachitos como gobernadores. Mario Trujillo en Tabasco; Luis H. Ducoing en Guanajuato; Rafael Hernández Ochoa en Veracruz; Rafael Rodríguez Barrera en Campeche.

Arreglos, destituciones, odios y otras yerbas…

Echeverría Álvarez se había ganado la enemistad de Reyes Heroles, por haberlo sustituido de PEMEX y no haberle permitido destituir como Líder del Sindicato petrolero a Joaquín Hernández Galicia pues el nativo de Tuxpan quería ser Director de PEMEX y líder al mismo tiempo, para controlar todo lo correspondiente al petróleo, conocedor de primera mano de las reservas probadas, probables y posibles del hidrocarburo, perfectamente consciente de su valor de canje global en los dos hemisferios. Dentro de esos jóvenes estaba el gobernador de Sonora Carlos Armando Biebrich quien ya preocupaba a todos los aspirantes en calidad de cardenales y sin haber llegado todavía la decisión a favor de Moya Palencia, se veía como inminente sucesor del virtual “presidente” que nunca llegó.
Para entender los entramados de pasión odio y algo más, es obligada la lectura del libro del maestro Don Jesús Blancornelas “Biebrich crónica de una infamia” (Editorial EDAMEX ) de como todo el poder la intriga, la mentira al presidente, los celos de género y el crimen como elemento vital de hechos, definen rumbos y propician mayor daño colateral.

Al ex gobernador de Campeche le bastaron dos hechos para perder toda posibilidad. La primera, hacer el Circuito Baluartes y destruir la casa templo de la burguesía a la campechana de Jorge Carpizo MacGregor y despedir al presidente en el aeropuerto de esa ciudad y recibirlo en el D.F. ante el asombro por la insensatez que, un gobernador de un Estado marginado del sureste tuviera un avión más rápido que el del presidente. La vanidad del Señor del Palacio Nacional fue violentada ante la prensa y ministros.

Para el Sonorense bastaron la unión de personajes como Augusto Gómez Villanueva, Cervantes del Rio, Porfirio Muñoz Ledo, para que inocentes campesinos fueran mortal carne de cañón y ninguno de ellos llegara a ser el privilegiado.

Los frívolos corruptos y el gris candidato

El sexenio de José López Portillo se circunscribe en la parranda, frivolidad, cabarets, despotismos ilustrado, ficheras, ficheros, Divas, musas literarias plagio, orgullos de nepotismo, trasmutaciones caninas, amantes al gabinete y la degradación integral del servicio público, para justificar el cambio de ruta y proyecto de nación. Una borrachera sexenal con burbujas de champagne y crudo del manto Cantarell petrolero. La agonía de los sueños presidenciables de Jorge Díaz Serrano y su socio del Clan Bush —Cheney (PREMARGOSA); hasta la crisis financiera por la corrupción de todos.

No podía haber mejor sucesor que el “celestino” de la luz y la alegría presidencial y quien le había convencido del talento neto y cereza del nepotismo de José Ramoncito, el gris junior. En medio de una nueva “crisis” emergió una figura sobria, pero hueca en principios morales. Miguel de la Madrid fue por decreto fallido “la renovación moral de la sociedad”.

Tecnócrata sin ningún trato social, pero bien visto por las elites del capitalismo y el Tesoro Norteamericano para tomar el control del petróleo en México a partir de los letales “acuerdos marco” (consultar escritos del Ing. Rafael Decelis). En su sexenio resurge el asesinato como instrumento de control político y de cualquier inconformidad o punto de vista periodístico que dañe los andamiajes y tramoyas del poder.

Son asesinados los periodistas Manuel Buendía y el ex gobernador de Yucatán Don Carlos Loret de Mola, quien había sido víctima de las malas artes del crimen político y linchamiento institucional por la muerte de un líder estudiantil de origen Campechano (El Charras) y donde se prometió de parte del entonces Secretario de Gobernación Manuel Bartlett se llegaría hasta las “últimas consecuencias”. Tengo entendido, se continúa trabajando en marchas forzadas al respecto y algún día tendremos la versión oficial de la verdad histórica y si no “Que la nación lo demande”.

Tema vomitivo

Mueren líderes sociales y políticos en accidentes inesperados pero muy certeros. Surgen de la nada grandes camiones y volquetes cargados de material para desaparecer en la nada. Casos dignos de ser analizados en las programaciones de ovnis.

Los sismos de 1985 dejan al descubierto la ineptitud, soberbia, corrupción y conducta de buitres del Gobierno federal y de la Ciudad de México. Sera tema de nuevas entregas pues el tema es vomitivo.

Manuel Bartlett Díaz en SEGOB y Adolfo Lugo Verduzco en el PRI habían librado la batalla de su vida y en su lucha de lodo, crímenes y vínculos con el narcotráfico, asesinato de periodistas, credenciales a capos y el agravio de ver a un infiltrado en los dominios de Hidalgo a Zorrilla Martínez como candidato a diputado federal, así como las naturales intrigas trianguladas para eliminar escollos desde SEP, DDF, SHCP, SEMIP la SPP , dejaron libre la designación a favor del menos esperado. No fue el “amigo de siempre” Manuel Bartlett, ni tampoco “El hermano que nunca tuve Alfredo del Mazo; sino el hijo de la Secretaria de Programación y Prepuesto Carlos Salinas de Gortari.

La ruptura por no recibir privilegios en embajadas de parte del siempre frívolo y etílico ilustrado en la baja política y maromero Porfirio Muñoz Ledo junto con el hipócrita Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, acrecentadas por la sugerencia desde la mansión de Carlos Hank González, se benefició con los efectos del sismo del 85 y en las elecciones de 1988, con la “caída del sistema” fue la respuesta vil, venganza desde la SEGOB por parte de Bartlett, para obligar a negociar su llegada a la SEP y candidatura a gobernador de Puebla como pago a sus servicios y alquimias fríamente calculadas. No cabe duda que información es poder… de negociar y chantajear en el sistema.

Buscar acuerdos y ceder espacios

Carlos Salinas de Gortari arrinconado, sin tener control de ningún instrumento político, enfrentado a sectores poderosos como el sindicato petrolero, los chantajes de Carlos Longitud y del mismo Fidel Velázquez desde la CTM, que quería más diputados, senadores y gobernadores parásitos iletrados a cambio, se vio en la urgencia de buscar acuerdos y ceder espacios a los grupos desplazados por de la Madrid para poder lograr la calificación de su cuestionada elección en manos de Manuel Bartlett y del grupo Atlacomulco.

Se le impuso al nada recomendable Gobernador de Veracruz, Fernando Gutiérrez Barrios en SEGOB, para combatir los chantajes y exigencias del sector caciquil obrero y operar los designios de desmantelar la estructura sindical en PEMEX y todo el país.

En el PRI -ironicamente- Salinas imponía a su leal amigo, Luis Donaldo Colosio Murrieta a la presidencia del CEN del PRI, mientras de inmediato Carlos Hank González le impuso en la Secretaria General a su incondicional, el ex gobernador de Campeche Rafael Rodríguez Barrera creando contrapesos y cobrando venganzas por los daños al perder la nominación de Mario Moya Palencia y sus chicos guapos de Atlacomulco.

Quienes estuvieron en esos tiempos dentro del PRI saben de las ordenes y contraordenes diarias vividas en ese partido y la lucha de poder sorda entre Carlos Salinas y Hank González. Luis Donaldo Colosio, el ser humano, no el mítico mártir partidista de Lomas Taurinas pudo lidiar con todos los chantajes desde Atlacomulco y construir su proyecto político, en vía de dos de sus colaboradores. El propio Colosio y Manuel Camacho Solís. Los aliados de Luis Donaldo fueron los enemigos letales de Hank González.

Y, mientras tanto en Campeche y Lomas Taurinas…

Desde Campeche se mandaban señales adversas al Profesor Hank González cuando en las oficinas del CEN del PRI de Diana Laura Riojas de Colosio, la Secretaria Privada era la hija menor de Carlos Sansores Pérez y las visitas de Luis Donaldo a Campeche a la casa de Sansores daban por hecho la candidatura a gobernadora de la Senadora del PRI Layda Sansores Sanromán.

El mismo gobernador Salomón Azar García había aceptado las ordenes de Colosio y Rodríguez Barrera exiliado en la embajada de México en Israel, no había podido sostener la candidatura al senado de su amigo Tirso R. de la Gala Guerrero, señalado por su compadre Guillermo del Rio Ortegón como vinculado al narcotráfico y tener una pista de trasiego en el rancho “Siete Copas”.

Si bien no tengo pruebas para demostrarlo, estoy seguro que el asesinato en Lomas Taurinas de Luis Donaldo Colosio no pudo ser por órdenes de su creador Carlos Salinas, sino de los que vieron en Luis Donaldo, un cambio pleno de la nomenclatura del PRI caciquil impuesta por los dos aspirantes presidenciales, el de origen español y el alemán vetados por la Constitución hoy modificada.

Cuando la bala del “caballero águila” (de “las águilas mexicanas”, grupo neo nazi poblano), Mario Aburto salió de su revólver, para matar en el acto a Luis Donaldo Colosio y como por arte de magia apareció en el escenario el gobernador de Sonora Manlio Fabio Beltrones para “tomar el control” en el estado gobernando por el primer panista de las concertaciones, en todos los Comités Estatales del PRI llegaron indicaciones de fax, para que todos le exigieran al “fiel de la balanza” aceptar la inmediata nominación del queretano Fernando Ortiz Arana, para sustituir al recién asesinado candidato y ante la revuelta generada con el “levantamiento” en Chiapas” aquel 1 de enero de 1994, el escándalo internacional por el asesinato de campesinos con sembrado de armas de madera en Chiapas y la cobertura inédita de la Comunidad Económica Europea tan preocupada por preservar “los derechos humanos” en el orbe, las exigencias del criminal vetusto y parasito líder obrero Fidel Velázquez de la CTM exigiendo un baño de sangre y exterminio por parte del Ejército así, como la recuperación de sus prácticas colonialista en toda América Latina.

Entre Sangre, crímenes, infamia, crisis institucional, Manlio Fabio Beltrones —totalmente hankista— exhibía un video para formalizar la orden que desde la Secretaria de Agricultura —sin mínimo rubor— había lanzado con desplegados de planas completas, con el nombre de todos los beneficiarios apoyando y sin pudor, la nominación del mediocre y apátrida Ernesto Zedillo Ponce de León, quien salió de una obscura oficina en los edificios del PRI para ser el candidato suplente y/ o beneficiario número uno del crimen.

Cambio sepultado

En la tumba de Colosio también se sepultaba el proyecto de un nuevo partido (Solidaridad) y el retorno de grupos con presunta visión nacionalista, aun dentro de las rapacidades.

Europa presumía haberle le ganado la partida a América para los Americanos, dejando “los diablos sueltos” al arrebatar la elección a Carlos Salinas, ver morir asesinado también al Diputado y virtual líder de la Cámara José Francisco Ruíz Massieu y frenar su proyecto económico en contra de los intereses de la CEE.

Lo siguiente muestra de quien había puesto a Ernesto Zedillo Ponce de León en Los Pinos, fue la llegada del ex gobernador del Estado de México, Emilio Chuayfett Chemor a la SEGOB y el siguiente paso fue “quitar los alfileres a la economía” para crear la crisis financiera y política que diera entrada al neo colonialismo y derecho de “hispanidad”, tesis de la Corona Española por medio del P.P. y su filosofo de lo absurdo José María Aznar.

Como buen canalla y traidor apátrida consumado, Ernesto Zedillo Ponce de León, una vez habiendo consolidado se gobierno cediendo todos los requerimientos de Bill Clinton, Acuerdos de Aguas; Desaparición de Isla Bermeja; Hipoteca de la producción petrolera y renuncia a la soberanía del mismo, eliminó de la SEGOB al enloquecido Chuayfett, entregó a los grupos caciquiles el control de sus estados a cambio de montar una escenografía de pluralidad democrática a permuta de gobernabilidad.

Una nueva crisis con crímenes y alardes de corrupción dejan el camino abierto al “Gran Tongo del 2000” y los mexicanos somos puestos en el proscenio del ridículo político, con la pantomima de lograr la primera transición travesti de la “dictadura perfecta” a la “perfecta dictadura” con un orate llamado Vicente Fox Quesada. Todo lo ilegal, se convierte en sublime y la injerencia abierta de grupos extremistas de España, del Partido Popular de Galicia, los amigos de Fox, la enigmática señora Robinson, Los Acuerdos Inconfesables, la garantía de impunidad de las Tepocatas, víboras negras y otras alimañas, pasan de la Nave del Olvido al “Arca de Martita” delicadamente justipreciada de amante a consorte para su abochornante “pareja presidencial”.

El contraataque alemán y el orate de palacio

De nuevo Hank y sus chicos, ven llegar un remedio a la Frankenstein, que resulta peor que la enfermedad. Este personaje atrofiado integralmente supera toda expectativa de ser un mediocre en el poder, para ser un insolente, rodeado de saqueadores y ladrones sin límites dentro y exportados de La madre Patria.

Los viajes internacionales, son un gran atractivo para ver al presidente trastornado, romper protocolos, jugar a las escondidas en monumentos insignes, dar conferencias de literatura sin saber pronunciar el nombre de literatos, dejar a sus hijos adoptivos de un veterinario seductor y violador de una casi “Dulcinea”, saquear, PEMEX como unos auténticos forajidos y ratas de alcantarilla, para intentar imponer a su esposa como candidata, quien a su vez quiere al Secretario de Gobernación Santiago Creel atrapado en sus deslices pero tan cínico, de negar la paternidad de su hija con la actriz Edith González y tirar la mentira de ser encargada exclusivo de servicios de alcoba en Las Cabañas.

La bonanza petrolera, excedentes, locuras del poder y tantas enajenaciones que ello deriva, llevaron a que los nuevos dueños del país, el clan Mouriño protegidos en Campeche y creación de Carlos Hank González impusieran a Felipe Calderón Hinojosa, después del “accidente” mortal de Ramón Martin Huerta y que diera las señales de llevar la fiesta en paz hasta el final.
Felipe Calderón a finales de los 70s había estado en Campeche enviado por Hank González y Reyes Heroles para combatir a Carlos Sansores y Víctor Cervera Pacheco en la Península de Yucatán. Acompañaba a Carlos Castillo Peraza para editar el “Diario de Campeche” en los talleres del “Diario de Yucatán” y allí conoció a los Mouriño durante el gobierno del Ing. Eugenio Echeverría Castellot.

De toda esa familia española que había llegado del Distrito Federal, después de trabajar en los hoteles de la Familia Romano (La Riviera) el jovencito aficionado desde entonces a las bebidas etílicas de prestigiado ron artesanal y curtidos “Habanero Arceo”, quedaría prendado de un jovencito llamado Juan Camilo.

Felipe Calderón y su tristemente célebre sexenio de “guerra contra las drogas”, más de 100 mil asesinatos sin esclarecer; encubrimiento de la tragedia de los niños de la guardería ABC en Sonora; la muerte de su proyecto pasional y político Juan Camilo, del también Secretario de Gobernación Francisco Blake Mora, el robo de la elección con su frase indigna del “haiga sido como haiga sido”; la impotencia de no imponer a Ernesto Cordero y en primera intención a Margarita Zavala para seguir en el festín, demuestra su misoginia contra Josefina Vázquez Mota y entrega la presidencia al PRI, cuando haciendo mal cálculo, Manlio Fabio Beltrones, hipócritamente, se hace a un lado, pensando que Enrique Peña Nieto, sería la misma que Francisco Labastida Ochoa.
Hoy el panorama es sumamente caldeado. El manejo torpe y sospechosamente letal en contra de la administración de Peña Nieto, hasta parece trasportarnos a los tiempos de Díaz Ordaz y su leal Secretario de Gobernación Luis Echeverría.

¿Es la continuidad la mejor solución a las cosas?

¿Quién protege a los verdaderos culpables de los hechos de Iguala y los Normalistas?

¿Estamos ante los resultados naturales donde los más cercanos al presidente luchan por destruir al prójimo como sucedió entre Manuel Bartlett y Adolfo Lugo Verduzco en busca de su nominación?

¿De la misma manera que en Sonora de Biebrich, hoy el gabinete de Peña Nieto crea conflictos políticos, económicos, sociales y culturales en todos los Estados donde pueden surgir prospectos incomodos a la inercia caciquil o factores de preocupación en la lucha?

¿Cuantos desafueros, crímenes políticos, accidentes oportunos, descalificaciones internacionales, devaluaciones, pandemias como la crisis del “H1N1”, “Sika” aparecerán para distraernos?

¿Seremos los mexicanos tan ingenuos e irresponsables de volver a evadir nuestro derecho de hacer bien las cosas con una participación histórica en las urnas que frenen las infamias y den el cambio de rumbo a México?

La “Tercera Alternancia” pregunto a usted amable lector ¿se está dibujando con los mismos, para más de lo mismo, pero con diferente color con mordazas de sangre, miedo, engaño masivo, señales de intolerancia, pugna global y crimen político?

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