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Edición 370
Escrito por Abraham García Ibarra   
Viernes, 30 de Marzo de 2018 01:19

 p2370

ITINERARIO 2018

El México profundo y la fatalidad geográfica

Abraham García Ibarra

EN PLENO PROCESO DE SUCESIÓN presidencial de 2018, el México profundo, habitado por 124 millones de compatriotas (más de 20 millones expatriados históricos y otros en calidad de ilegales amenazados con la deportación), se puede retratar en el siguiente espejo:

SEGÚN EL ÍNDICE GLOBAL de Impunidad 2017, México ocupa el primer lugar en América Latina y cuarto en el mundo. El estado de México se lleva las palmas en esa asignatura.

El estudio indica que 93.7 por ciento de los delitos no es denunciado. Las víctimas más recurrentes del crimen son adultos mayores: Más de 24 millones.

El reporte sobre Percepción de la Corrupción que formula Transparencia Internacional coloca a México, entre 180 países evaluados, en el sitio 135 (para que quede claro, se trata de la tabla de países omisos en el combate a esa peste).

Desde hace una década, México, en esa disciplina, viene en caída libre. Ya en el primer semestre de 2017 se emitió un escrutinio que concluye que el costo de la corrupción en México es de un billón de pesos anuales.

Más de 53 millones de mexicanos en pobreza

De la Población Económicamente Activa (PEA/ unos 60 millones de individuos), más de 30 millones de personas subsisten en la economía negra.

De la masa con capacidad laboral, vía triangulación contractual, unos ocho millones carecen de Seguridad Social.

El Consejo Nacional de Evaluación de las Políticas de Desarrollo (Coneval) reporta que, de 2010 y 2016, el número de mexicanos en pobreza -de la “moderada” a la extrema-, pasó de 52 millones 813 mil, a 53 millones 418 mil.

La lista Forbes de los más ricos del mundo nomina a más de una docena de mexicanos. Cuatro de ellos suman en su conjunto fortunas por más de 110 mil millones de dólares.

2017, el año más violento en la historia contemporánea

Todas las estadísticas, basadas en información del Sistema Nacional de Seguridad Pública coinciden en que 2017 ha sido uno de los años más violentos en la historia del México contemporáneo. Sobre los delitos de alto impacto, señorean los homicidios dolosos perpetrados con arma de fuego.

En el renglón de criminalidad, sobresalen los delitos tipificados como feminicidio. Van al alza.

Entre ninis y adultos expoliados en sus pensiones

En los dos polos sociológicos que por edades dividen a la sociedad mexicana están adolescentes y jóvenes. En este rango, se contabiliza a ocho millones de ninis, privados de oportunidad de estudio y trabajo.

En el otro polo demográfico están adultos de entre 50 y 80 años. Entre estos rangos están los trabajadores y empleados jubilados. No todos son beneficiarios de algún régimen de pensiones.

Aquellos que ahorraron preventivamente en algún sistema pensionario para “tener una vejez digna”, han acumulado más de tres billones de pesos. El más alto porcentaje de esos recursos está expuesto a la gestión financiera privada al través de las Administradoras de Fondos de Retiro (Afore).

Las Afore transfieren esos fondos a las Sociedades de Inversión Especializadas. Estos entes colocan esos recursos en el mercado especulativo. Más de dos billones de pesos han sido utilizados para fondear al gobierno federal y algunos gobiernos de los estados, así como a algunos corporativos privados mexicanos y extranjeros.

Adicción a la deuda con cargo a los contribuyentes

La deuda pública del gobierno federal rebasa ya los 10 billones de pesos. Los gobiernos de los estados acumulan débito por más de 700 mil millones de pesos.

En ambos niveles de gobierno, un alto porcentaje del presupuesto de egresos privilegia el gasto corriente. En éste medra una obesa e improductiva burocracia.

Siete magistrados tienen la última palabra en la elección presidencial

En el proceso de elecciones generales en 2018, se calcula, sin considerar los incuantificables financiamientos privados, se gastarán más de 60 mil millones de pesos.

Están convocados a votar el 1 de julio unos 89 millones de mexicanos. “Las elecciones son de todos”, dice un mensaje del Instituto Nacional Electoral, pero los resultados de la elección presidencial son calificados por siete magistrados del Poder Judicial de la Federación. Sus sentencias son definitivas e inatacables.

La Constitución protege tus derechos; nosotros protegemos la Constitución. Eso dicen en un spot, palabras más, palabras menos, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Pero dice el Índice Global de Impunidad que México es primero en América Latina y cuarto en el mundo.

Variaciones primaverales sobre el mismo tema

Si el lector percibe y concluye que esta especie de digresión es producto de las alucinaciones de primavera, podríamos concederle que no anda tan desencaminado. Tope en ello, corre video:

La primera ocasión que tomamos en serio el diagnóstico sobre El asesinato del alma fue en la portada de un breviario que recoge el estudio siquiátrico del doctor Morton Schatzman, que tiene como objeto de estudio a quien identificaremos como el Juez Schereber.

Quien llegó a ser juez, fue hijo del doctor Daniel Gottlob Moritz Schreberpadre de una descendencia perturbada, uno de cuyos miembros terminó suicidándose. Daniel, el juez, tuvo al menos dos reclusiones con duración de trece años en los siquiátricos. El estudio de Schatzman toma como base los apuntes autobiográficos de ese alienado y trágico personaje.

DNM Schreber estudió medicina, pero se impuso la misión de pedagogo. Ensayó con sus propios hijos sus métodos docentes bárbaros. Se trataría no sólo de la disciplina física, sino del “rigor moral” (en una época que consideraba violentados los valores de la cultura alemana).

El implacable método Schreber - “la letra con sangre entra…”- aclimató en Alemania y buena parte de Europa. Con su nombre se creó una red de planteles de los que conocemos como kindergarten. Siquiatras y sociólogos que han estudiado El asesinato del alma coinciden en que no resulta aventurado sostener que en la “doctrina pedagógica” comentada se formaron aquellos que dieron forma y praxis al Tercer Reich.

Lo que importa de esa lectura, es la denuncia sobre el Génesis de los regímenes totalitarios, que tienen largo tiempo en gestación en México.

El corte nos remite a otra consulta: Los lectores e intérpretes de Platón aseguran que era reacio al uso de la fuerza para obligar a los niños a aprender. A un sabio y viejo republicano español, asilado y mentor en México, don Carlos Sáenz de la Calzada, le escuchamos completar la sentencia: La letra con sangre entra… Pero con sangre de maestro.

La oscura caverna del autor de La República

Platón postuló la liberación del hombre por el conocimiento: Por encima de los instintos, la razón. Sobre la intuición, la ciencia. La “luz del Sol” activa la inteligencia: Anuncia la realidad.

A la naturaleza de esas cosas, dicen en nuestros días expertos en Sicología, contravienen los medios de comunicación que reproducen opiniones hegemónicas y pretenden moldear nuestras conciencias a los fines del poder.

Aquellas verberaciones del pensamiento platónico se observan, especialmente, en El mito de la caverna y en el estado de alienación de “los encadenados”, eternos prisioneros de las penumbras. A la Drácula.

Iris Murdoch (El fuego y el sol) se adentró en la caverna donde encontró las partes del alma (la conciencia). Dice que, en su parte más baja, el alma es egoísta, irracional y delusoria. En su parte central, es agresiva y ambiciosa...

El tambaleante dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza se ostenta como guardián de las reformas transformadoras; entre las más defendidas, la Energética y la Educativa, cuyo custodio de esta última es también el coordinador general de la campaña de José Antonio Meade Kuribreña, el ex titular de la SEP, Aurelio Nuño Mayer.

Ochoa Reza exhibe una maestría en Filosofía Política por la Universidad de Columbia (USA). Es de sospecharse que, entre sus libros de texto estuvo La República, de Platón. Cómo saber si ahí estudió el mito platónico y si lo hizo en griego o en inglés.

Lo cierto es que el hoy candidato plurinominal a diputado federal, para elevar la calidad del debate ideológico del PRI con sus adversarios (pues ideas, eran la propuesta de Platón), desde sus primeras jornadas exclamatorias acuñó y repite a la primera provocación aquello de taponar la oscura caverna del populismo.

Como ni el spot ni el Twitter dan para más, el celoso vigilante del porvenir electoral nos deja abandonados en la ignorancia sobre las premisas filosóficas que dan soporte a su voz de alerta.

Como sea, las preocupaciones del ex director de la Comisión Federal de Electricidad (que genera más luz que el Sol platónico), son para impedir que México regrese al pasado. El libreto se ha vuelto coro tricolor, con escasa partitura y una dedicatoria muy individualizada.

Para hablar de ese tópico, está el clásico cinematográfico Mi pasado me condena; está el técnico agua pasada no mueve molino. Con José José, ya lo pasado, pasado. En fin.

La carta a la Casa Blanca, de palpitante actualidad

Nosotros hacemos una breve retrospectiva a 1924 y volvemos a un texto ya varias veces expuesto con crédito a ex titular del Departamento de Estado (USA):

Tenemos que abandonar la idea de poner en la Presidencia mexicana a un ciudadano americano, ya que eso conduciría otra vez a la guerra. La solución necesita de más tiempo: Debemos abrirles a los jóvenes mexicanos ambiciosos las puertas de nuestras universidades y hacer el esfuerzo de educarlos en el modo de vida americano, en nuestros valores y en el respeto del liderazgo de Estados Unidos.

México necesitará administradores competentes y, con el tiempo, esos jóvenes llegarán a ocupar cargos importantes y eventualmente se adueñarán de la misma Presidencia. Y sin necesidad de que Estados Unidos gaste un centavo o dispare un tiro, harán lo que queramos y ¡Lo harán mejor y más radicalmente que lo que nosotros mismos podríamos haberlo hecho!

La carta de navegación rumbo a Los Pinos se cumplió apenas cinco décadas después, con el asalto al poder político por la autodenominada Generación del cambio y su indómito profeta Carlos Salinas de Gortari.

Fue en el periodo de Salinas de Gortari (que se prolonga ya por 30 años) en que empezaron a tomar las ciudadelas del sector público los egresados de las universidades de los Estados Unidos. Una revisión de los programas de estudios de estos planteles nos indica que algunos privilegian las ciencias históricas para formar a sus futuros líderes. Las ciencias del pasado, pues.

Sólo a manera de ilustración citamos un dato: En 1993 en el directorio de la Administración Pública federal ya estaban incrustados dos maestros y cinco doctores formados en el Instituto Tecnológico de Massachusetts.

Ideología y utopía en los Estados Unidos

De ese Instituto capturamos un nombre, 1976: Walter Dean Bunham. De este nombre tomamos cinco líneas de texto: Desplazamiento de la política norteamericana hacia la zona crepuscular de las irregularidades oficialmente cometidas, de apatía de las masas y de luchas hobbesianas entre grupos étnicos, raciales y de otros intereses radicalmente polarizados.

Unas líneas adicionales: En la medida en que la perturbación económica de los setenta resulte ser una Konjunktur, más que un desorden temporal, es muy probable que la incompatibilidad se torne más visible en los años venideros.

Esa incompatibilidad está en las entrañas mismas del Estado como mecanismo de dirección, cuya tarea primordial consiste en legitimar el orden existente de dominación económica y social y mantener esa legitimidad, y ser un vehículo de importancia primordial para la acumulación de capital. Hasta aquí Bunham.

Es obvio que, después de medio siglo, el desequilibrio en la distribución de la riqueza en los Estados Unidos rompió las costuras de aquella doble función del Estado.

Creímos necesario tomar ese atajo para señalar que el huésped de Massachusetts nombrado, escribió las líneas anteriores como prefacio al libro Ideología y Utopía en los Estados Unidos, una serie de ensayos debidos al maestro de Sociología y Ciencias Sociales, e historiador Irving Louis Horowitz (Fondo de Cultura Económica/1980).

En la introducción de la obra, su autor subraya de ese periodo el pesimismo económico y el alejamiento masivo del proceso de los partidos políticos: El comportamiento de las élites y de las masas por igual, no requiere de ningún nihilismo para explicar el malestar actual; asesinatos que cambiaron el curso del liderazgo político, conspiraciones para impedir el funcionamiento adecuado del proceso electoral; la mala información, o desinformación condensan lo que Horowitz describe como la experiencia norteamericana de la derrota nacional.

Los signos de la locura americana

“Asesinatos políticos, conspiraciones contra el proceso electoral, desinformación…”. La obra de Horowitz data de 1977. Cuatro décadas después, esos perversos signos se observan en la campaña electoral de Donald Trump y su ocupación de la Casa Blanca en un proceso que, por nuestra parte, podemos caracterizar como La locura americana, que tiene en su centro nuclear la aproximación al fascismo.

Los estigmas citados, que marcan la degradación del sistema político norteamericano, nos incumben en 2018.

Tres de Harvard y uno de Yale

Lo advertimos, porque los de la democracia sin adjetivos a la mexicana, dictaron a título de fe la imitación de los modelos de Estados Unidos e Inglaterra para trasplantarlos a México.

Lo advertimos, porque de los más recientes presidentes mexicanos, cuatro blasonaron de sus pergaminos en universidades gringas: Tres por Harvard y uno por Yale. El candidato simpatizante del PRI, José Antonio Meade Kuribreña lo ostenta por Yale.

“Sin gastar un solo centavo o disparar un solo tiro, los jóvenes ambiciosos mexicanos harán lo que queramos, y lo harán mejor que nosotros”. Manes de la fatalidad geográfica o destino manifiesto. Es cuanto.



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