TECNOCRACIA, NUEVO HITLER

Evo Morales y el nacionalismo boliviano

Espionaje y totalitarismo mundial;

Eurozona, “patio trasero” del imperio

EL MAESTRO EN PERIODISMO y de historia de México y Universal en la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, licenciado Carlos Alvear y Acevedo, decía en sus clases que durante la Segunda Guerra Mundial -1939-1945 -, se convocó al mundo para luchar unidos contra el totalitarismo, pero arguía que de esa contienda en la cual murieron más de 55 millones de seres humanos, el triunfador fue el totalitarismo.

El rey Juan Carlos

A MAYOR ABUNDAMIENTO, cuando varios de los ministros del Tercer Reich salieron de la cárcel de Spandau, luego de cumplir sus condenas hará aproximadamente unos 30 años, expresó el responsable de la industria de la construcción en la Alemania de Hitler que -palabras mas, palabras menos -, el mundo ya no debería temer la presencia de un nuevo Adolfo Hitler en el campo de la política mundial y que a lo que había que temer era al establecimiento de la tecnocracia como sistema de gobierno de aspiración de dominio total. El totalitarismo “el nuevo Hitler” – se decía entonces -, será precisamente la tecnocracia.

Espionaje totalitario

En nuestros tiempos, con motivo de las revelaciones sobre espionaje mundial sobre el espionaje del imperialismo norteamericano en todo el mundo, hechas por el joven ex espía de la CIA y ex contratista estadunidense, Edward Snodwen, se ha puesto de manifiesto que una muestra de ese totalitarismo triunfante en la Segunda Guerra Mundial tiene, en los inicios de este Siglo XXI sometido al mundo a una labor de espionaje -dentro del programa PRISM-, que se extiende desde Washington a muchas naciones en el mundo y abarca hasta la vida privada de personas suscriptoras de cuentas cibernéticas o computarizadas.

No es nuestra intención meternos en disquisiciones de computación, pero baste decir con que, con el argumento de “lucha contra el terrorismo”, el espionaje totalitario del imperio del Destino Manifiesto se hurga electrónicamente a través de las cuentas inscritas en los diferentes sistemas de computación, en lo más íntimo de los seres humanos, de los dirigentes de los países, del sistema de gobierno mismo y de los archivos, sin considerar respeto alguno tratándose de fronteras nacionales, ni de la vida en el hogar, en sindicatos, agrupaciones civiles y religiosas, culturales y de toda índole, sobre todo en las llamadas redes sociales.

El agravio a Bolivia

El descomunal poderío de ese totalitarismo que ya tiene avasallado al mundo, por lo que se pudo advertir fehacientemente, al convertirse los gobiernos de Italia, Francia, España y Portugal - otrora cunas de la civilización-, en simples lacayos del imperio del Destino Manifiesto, según el sentir general después de que los representantes de esas naciones negaron el Presidente de Bolivia, Evo Morales, sobrevolar su territorio, con lo que se puso en riesgo la estabilidad del avión en que viajaban muchos funcionarios que originalmente vieron en peligros sus vidas, porque la aeronave debería ser reabastecida de combustible para poder continuar el vuelo y recibir también mantenimiento, por el largo trayecto entre Moscú, capital de Rusia y La Paz, capital de Bolivia, en Sudamérica.

Evo Morales y sus acompañantes fueron objeto de trato vejatorio, puesto que en Austria, donde permitieron que descendiera la nave, el representante diplomático de España pretendía revisar el avión para “verificar si no viajaba escondido Snodwen para ser asilado en algún país de Sudamérica, ya fuese Bolivia Venezuela o Nicaragua

Esa afrenta no la permitió el presidente Evo Morales, porque de acuerdo a los Tratados Internacionales correspondientes, una nave en la que viaja el presidente de una nación, es extensión territorial de la nación que gobierna.

No extraña esa actitud de parte del gobierno de España, donde aún son soberanos los miembros de la familia de los Borbón, quienes se han distinguido por ser serviles a los Estados Unidos desde los tiempos de Carlos III a finales del Siglo XVIII y Carlos IV, quien colaboró con Washington, a través de Alejandro Humboldt, para que en la Nueva España se le entregaran secretos a dicho científico en funciones de espía, mismos que servirían para invadir a México en 1846-1848 y arrebatarnos mediante el Tratado de Guadalupe Hidalgo, más de la mitad de nuestro territorio nacional

Se necesita tener una mentalidad colonial, una formación colonialista, para agredir así al presidente de una nación soberana, como lo es Bolivia y a su presidente, Evo Morales. La familia real, cabe mencionar, está muy desprestigiada ya, por la corrupción de que se ha hecho responsable el yerno de Juan Carlos, Iñaki Undandarian, a quien se acusa de enriquecerse a la sombra de su suegro, el rey Borbón, tan aficionado a la matanza de elefantes de África, mientras España está en aguda crisis económica por el enorme adeudo de los gobiernos borbonistas al FMI y BM, igual que Francia, Italia, Portugal.

Poderío desmesurado

Las revelaciones de Snowden han permitido conocer que el enorme poderío de los halcones de Washington -que han ordenado espiar a su misma población -, aunado al poder de convencimiento por los prestamos condicionados del FMI y BM, es un argumento tan fuerte, como para convertir a la Eurozona en “patio trasero de los EU.

Es tal la fuerza de convencimiento del imperio monroísta del Destino Manifiesto, que asimismo presidente ruso lo espió la Gran Bretaña, dentro del espionaje antiterrorista, sin que oficialmente la nación rusa haya presentado formal protesta por situación tan afrentosa.

La actitud de negar que Evo Morales volara sobre territorio de Francia, Italia, Portugal e Italia, para aterrizar en las Islas Canarias, pone a flote que la supeditación de esos países al imperio no es nueva, puesto que tropas de esas naciones de la zona Euro, han participado con el imperialismo del Destino Manifiesto en las invasiones en Afganistán, Pakistán, Irak y con el apoyo a los rebeldes sirios.

Aunque interiormente, el imperialismo del Destino Manifiesto da muestras de decadencia sobre lo cual no queremos abundar ahora, exteriormente, el espionaje cibernético que defiende Obama ha dado ocasión para conocer que los halcones monnroístas son los amos en el mundo y que le han perdido el respeto a la humanidad y a sus derechos más esenciales, como el de la privacidad y que las soberanías de las naciones son agraviadas con la mayor impunidad del mundo.

En efecto, el mundo fue convocado a la lucha contra el totalitarismo en la Segunda Guerra mundial, pero el totalitarismo resultó victorioso de esa contienda. El espionaje internacional y los numerosos cómplices con que cuenta, a sí manifiestan ostensiblemente.