¿Hay alguien en quien creer?
El hombre con poder
se ha convertido en
lobo del hombre
MANUEL MAGAÑA CONTRERAS
(Exclusivo para Voces del Periodista)
Después de conocidos los pactos secretos entre el PRI y el PAN para intercambiar votos en favor de sus candidatos, a cambio de aprobar impuestos contra el pueblo y de enterarnos que Marcial Maciel fundador de los Legionarios de Cristo -de los cuales forman parte en su rama seglar Regnum Christum Marta Sahagún y Vicente Fox-, violó a sus propios hijos, ¿es posible creer en las cúpulas de mando del caótico mundo de nuestros días que se aproxima a una gran crisis económica y moral que compromete hasta la estabilidad física de nuestro planeta?
El mundo se hunde en la desesperanza ante los augurios que nos anuncian los terremotos en Haití, Argentina, Japón, Ecuador, Afganistán, Chile, Pakistán, etcétera, aunados a los efectos contra la salud del género humano y la estabilidad del medio ambiente por el calentamiento de la tierra. Estas catástrofes, aunadas a la creciente violencia en el mundo, al incremento de la pobreza y la desigualdad, de la pérdida de valores, principios y normas, a las agresiones armadas de EU, contra los pueblos de la tierra, alimentan una sicosis que va en constante incremento.
Hace 150 años, cuando tenía lugar en el territorio mexicano la guerra civil con motivo de la implantación de las Leyes de Reforma que dieron como resultado la separación de la iglesia y del Estado, el maestro don Justo Sierra, en su libro Juárez, su Obra y su Tiempo, señalaba que “tal parece que nos encaminamos a un suicidio nacional”.
La frase puede repetirse ahora con mayo fuerza, puesto que en México, desde hace 40 años, estamos en permanente crisis, las generaciones de hoy no conocen los tiempos normales
Todo el que tiene poder, abusa
En nuestro medio, tal parece que, como hace siglo y medio ocurría en suelo mexicano, según la observación de don Justo Sierra, se nos condujera a una especia de suicidio nacional. Tal parece que se nos quiere llevar deliberadamente; es decir, con premeditación, alevosía y ventaja, a una crisis que desemboque en la comisión de actos represivos contra la población.
El miércoles 3 de marzo se conoció en México, la declaración del gobierno de Obama, a través de su embajador y procónsul, Carlos Pascual, que en México “las cosas van por buen camino”. ¿Por buen camino para quién? ¿Para los intereses de los Estados Unidos? Pese a que la “guerra” contra el narcotráfico que debería librarse en territorio mexicano, ha sido trasladada a nuestro suelo, perversamente, ha cobrado en México la vida de más de 18 mil víctimas en los últimos tres años.
En México, cuando lo que se necesita es impulsar la creación de nuevas empresas mexicanas que den trabajo digno y justamente pagado a nuestros trabajadores, se aplican medidas impositivas contraproducentes, como el IETU, que frenan el surgimiento de nuevas fuentes de ingresos.
¿Se está gobernando para beneficio de México, cuando las grandes empresas extranjeras no pagan impuestos por más de 500 mil millones de pesos al año, mientras al mexicano que quiere poner el más pequeño de los “changarros” se les cobra el IETU, incluyendo la aplicación de medidas coercitivas que especialistas califican de “terrorismo fiscal”?
Sociedades permisivas destruyen
Una nueva arma para corromper a los pueblos y someterlos mejor a los dictados de la economía globalizada que se apoya en el poderío norteamericano, es la creación de sociedades permisivas y hedonistas, como la que aquí ha empezado a edificar el gobierno del Distrito Federal, con la creación de las uniones de convivencia gay, con opción a adoptar niños. Respecto de este tema, no hablamos aquí del problema personal que alguien pueda tener en cuestiones sexuales, eso pertenece a la intimidad de cada quien, eso es un asunto personal de quien lo sufra. Lo que decimos aquí es que ya existe una homosexualidad globalizada para implantar patrones respecto de los cuales, México, según lo demuestran los hechos, es “conejillo de ”Indias”, par experimentar la aplicación de dichas uniones de convivencia que destruyan la base de toda sociedad sana que es la familias, tal como lo dispuso el Creador y lo permiten el orden moral y natural, mediante el matrimonio de hombre y mujer que permite la conservación de la especie.
¿A quién recurrir? ¿En quién creer para que la gran crisis moral, económica, social y ambiental que se avecina no nos alcance? Desde hace tiempo estamos esperando que en el seno de la Iglesia Católica, sus jerarcas tomen medidas concretas, eficaces para por alto a los curas pederastas que violan niños en el interior de los templos y las escuelas? Pedir justicia en estos casos ha sido hasta ahora igual que “predicar en el desierto”.
El hombre, lobo del hombre
En nuestro medio, desde hace diez años, empezó la desesperanza del mexicano. Se confiaba en que al llegar al poder un representante del partido blanquiazul, en el que siempre se ha dicho que “militan los mejores hombres de México”, empezó la corrupción a niveles aplastantes. El enriquecimiento de funcionarios y sus familiares, se aceleró y la impunidad ante las denuncias ha sido la respuesta.
¿En quién creer si la misma Suprema Corte acaba de informar que de acuerdo a sus investigaciones, el muy personal amigo del presidente Felipe Calderón, Juan Francisco Molinar Horcasitas, actual secretario de Comunicaciones y Transportes y ex director del IMSS y el exgobernador de Sonora, Bours, tienen responsabilidad en el incendio de la guardería ABC, de Hermosillo, Sonora, donde murieron quemados 49 niños y hasta el momento de escribir este comentario la impunidad ha sido la respuesta?
En México, el hombre con poder se ha convertido en lobo del hombre víctima del empobrecimiento neoliberal y deliberado. Sobre del desvalido caen toda las desgracias y a quienes pertenecen a los círculos del poder, lo único que les ocurre es que resultan favorecidos en todo y por todo, como es el caso de los excedentes petroleros que van a parar a las dependencias para aumentar el gasto corriente a favor de los burócratas de la clase dorada que se pude en riquezas, en apenas 10 años de mandato.
Hasta el planeta tierra protesta
Los hombre con poder que tienen su sede en Washington, han abusado tanto del poder en el mundo, a través de incondicionales exentos de valores patrios, que sus agresiones han tocado la naturaleza mismo del planeta Tierra. El calentamiento de la tierra no es otra cosa que consecuencia de los abusos contra la ecología cometidos en diversas partes del mundo, para la extracción de las riquezas naturales, con vistas a una explotación ilimitada de las riquezas de las naciones sojuzgadas bajo la economía global del neoliberalismo.
No hay poder humano, ahora, que tenga el valor de enfrentarse a ese “gobierno mundial” que configura el poderío económico globalizado. La perversión de las costumbre de los pueblos, la destrucción de sus valores culturales, de la familia, del sentido de nacionalidad, caen bajo el poder destructor de los globalizadores.
No hay en quien creer ahora a nivel de clases dirigentes, porque la deserción, en aras de ese poder que representa los EU, lo domina todo.
Paradójicamente, en los mismos EU han empezado a dejar de creer en sus gobernantes. De allí las críticas tanto a Obama y su partido demócrata, como a los del ala republicana. El género humano empieza a dejar de creer en sus tiranos y l tierra misma, es decir, nuestro Planeta, empieza a dar muestras ya, de desesperación, ante las agresiones que en lo ecológico ha sufrido por la ambición desmedida de riquezas naturales, como el petróleo, próximo a extinguirse.
¿En quién creer? Diríamos aquí que es retornar al mundo de los principios, las normas y los valores para que la sociedad pueda sanear y emprender así el camino de la regeneración humana, hoy en crisis por la falta de moral de sus dirigentes. Esta es la forma de evitar el “suicidio nacional” que nos amenaza.
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