Edición 220 |
¿Inestabilidad en puerta?
JORGE GUILLERMO CANO
(Exclusivo para Voces del Periodista)
NO HAY RESQUICIO DE DUDA: la clase polÃtica mexicana es un fiasco (más en el sentido de fracaso que decepción) y el problema es que, por lo pronto, no parece haber opción al frente.
No se han construido las alternativas y la kakistocracia sigue viento en popa, a toda vela.
Pero hay inconformidad social, cada vez más profunda.
La desestabilización de un paÃs cuya “estabilidad†se confirma a sà misma con el mantenimiento de la excepción para algunos cuantos privilegiados del sistema, es una probabilidad simplemente lógica.
Que no perciban el riesgo, o que apuesten a los aparatos de control, es otra cosa. La historia da cuenta de esos crasos errores.
En el paÃs todo priva la útil funcionalidad desde la polÃtica degradada, que levanta banderas para incautos y perfila cruzadas aunque cruzados no haya.
Los estallidos sociales, debieran entenderlo, responden a otras dinámicas y son otros sus referentes.
Las gestas de la ganancia terrenal, y liviana, del mañana temprano, carecen de sentido en el amplio espectro nacional.
Por ejemplo, los pleitos camarales por reformas que cada partido pretende maquillar a su gusto son en realidad irrelevantes, carecen de importancia si el fondo es lo que se atiende.
Como están las cosas ¿Más o menos diputados? ¿Más o menos distritos según cada quien crea sacar ventaja? -Lo mismo da. La población, en estricto apego a su realidad, nada tiene qué esperar de tales “cambios†y “reformasâ€.
Configuraciones emergentes
La realidad empuja y es de esperarse que en el mediano plazo se configuren fuerzas polÃticas más representativas y confiables que las actuales. Sin los actores de hoy, como la condición insalvable.
La paradoja es que en esa configuración estriba la permanencia del sistema en curso.
Si se impide, como pretenden las fuerzas más obtusas de la partidocracia de todos colores, la inestabilidad dictará otros rumbos, ciertamente impredecibles.
Y no hablamos, en obvio, de emergencias etiquetadas en la negativa de lo malo por conocido desde los mismos malos y conocidos.
En tanto, ex secretarios de Hacienda advierten del estallido social si el gobierno no promueve la inversión productiva y la creación de fuentes de trabajo.
SerÃa un paliativo, porque el problema es más grave de lo que parece.
¿Agua y aceite?
El fracaso electoral del PAN se explica por su conversión en un partido a la caza del poder económico derivado del control polÃtico.
La probable alianza PAN-PRD en Oaxaca, y el no tan discreto amago de su reedición en Sinaloa y otras entidades, no dejarÃa cuentas positivas al panismo.
En el caso de Sinaloa ¿Con quién irÃa el PAN? ¿Con Mario López Valdés, si se impone a Jesús Vizcarra Calderón en el PRI y el mochiteco apoyado por Juan Millán se retira de su partido?
Siendo realistas, no parece que hubiera otro destino para esa alianza.
Desde luego, Manuel de Jesús Clouthier, Heriberto Félix Guerra y Alejandro Higuera, panistas, serÃan opciones para la negociación de la alianza pero no serÃan candidatos de la dupla si se da la defección de López Valdez.
Del PRD, se puede dar por descontado que ninguno de sus cuadros, y menos los que aparecen como promotores del “frente opositorâ€, figurarÃa seriamente a la hora de definir un candidato.
La causa terrenal
Por lo demás, se puede adelantar que tales alianzas, de concretarse, no conllevan más propósito que la terrenal búsqueda del poder relativo. Unos más, otros menos, se entiende. Asà son los repartos.
Para el pueblo quedarÃa, a fin de cuentas, tan sólo el desfiguro de una democracia fallida al servicio de negociantes sin escrúpulos.
En el inter, es comprensible que el PAN vea ahà la posibilidad de un triunfo relativo ante la evidencia de su debilidad (por sus torpezas); en el PRD, los personeros que pretenden protagonizar la “alianza†de marras no ven más que la ganancia terrenal, la continuidad en el enchufe al poder, sin referencia ética alguna.
Ahora que, a la luz de sus posiciones e intereses materiales, esos partidos, junto al de enfrente, no son agua y aceite: son la misma gata levemente revolcada.
Entre pragmáticos te veas
Y como de poses se trata, la “bancada†priÃsta en San Lázaro se aprontó a calificar como “acto desesperado†la posible alianza electoral del PAN y el PRD en pos de la gubernatura de Oaxaca.
El inefable coordinador de la diputación priÃsta del estado de México, Emilio Chuayffet Chemor, acusó el "oportunismo y pragmatismo sin escrúpulos ni valores" de los probables aliados.
Pero no les teme, agregó (otros desfiguros aliancistas, del PRI, han sido ignorados por actores como Chuayffet) reconociendo que, si se produce la alianza, serÃa “legal y está prevista en el Cofipeâ€.
Detrás del asunto
Pero, en estricto, la alianza PAN-PRD, en Oaxaca y donde se acomode, no puede verse más que como parte de una estrategia para evitar que el PRI regrese a Los Pinos.
Eso en el plano nacional, desde el sector “pensante†de esos partidos; en los planos locales la cuestión no va más allá de la búsqueda de permanencia en la polÃtica como cosa rentable, seguir en nóminas (como la secreta de Sinaloa que pronto será conocida).
Las alusiones a una “alternancia†de figuraciones, y de alianzas históricas cuya dimensión es vulgarmente manoseada, para justificar el oportunismo rapaz, no van más allá de una reiteración del cinismo recurrente en los “botútiles†y otros enquistados del status.
El próximo año habrá elecciones para gobernador en 10 estados: Chihuahua, Sinaloa, Durango, Tamaulipas, Veracruz, Puebla, Oaxaca, Aguascalientes, Tlaxcala y Zacatecas. En casi todos ellos lleva ventaja el PRI.
Salvo Aguascalientes y Tlaxcala, que son gobernados por el PAN, y Zacatecas (PRD) los demás están en poder del PRI.
Alianza desacreditada
Como sea, el anunciado “Amplio Frente Opositor", con tan sólo PAN y PRD (el PT y Convergencia no han aceptado la propuesta, por ahora) surge con el descrédito que arrastran.
Lo que sucede, como coligen ciudadanos, es que ninguno de los dos es verdadera oposición, ni derecha ni izquierda.
Y por si alguna duda quedara del rapaz oportunismo de la trilogÃa partidaria, en Michoacán se aprestan a aliarse, fÃjese nada más, el PAN y el PRI contra el PRD, actualmente gobernante.
Para derrocar al PRD, dicen, como el panredé al PRI y cualquier otro colache con “argumento†semejante.
Tamborazos
-El rector de
-Un incremento al subsidio universitario fue negado en el propio congreso local.
-En Sinaloa, los “destapadosâ€aspirantes a gobernar el estado, de todos colores, andan desatados, como burros sin mecate
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