A través de mis cristales
HÉCTOR CHAVARRÍA
La farsa de la “astroarqueología”
Luego de un largo tiempo justamente olvidada y al parecer muerta, la “astroarqueología” está siendo “resucitada” por la TV.
Nada menos que, por el alguna vez serio, Canal de la Historia, que además no ha dejado de fastidiarnos con las repeticiones de la idiota serie “los camioneros del hielo” y, con los evidentes farsantes de la serie “cazadores de ovnis”.
Esto muestra el claro deterioro de los canales que buscando más audiencia para los infames “infomerciales”, no dudan en colocar cada vez más basura en sus espacios.
¿Qué rayos es la astroarqueología?
En vista de este afán comercial ahora nos vuelven a recetar las archisabidas tonterías acerca de la historia humana, de acuerdo a su interpretación pero más bien a la especulación con base en la ignorancia. La astroarqueología pretende que los humanos fuimos visitados por extraterrestres en la antigüedad y que éstos crearon todas las grandes obras humanas e incluso las religiones. No hay dioses, sólo “astronautas antiguos”.
Esta idea acerca de la “posible influencia extraterrestre” en el desarrollo y la historia, fue una herramienta más bien juguetona, inventada por los soviéticos para hallar interpretaciones alternas a los mitos religiosos y, se utilizó para que los jóvenes tuvieran otra visión de las fantasías bíblicas, por ejemplo, si la “deidad” en el Monte Sinaí no era un “dios furioso” sino un extraterrestre poseedor de una avanzada tecnología, los “mandamientos” de la Ley Mosaica adquirirían un significado obviamente diferente.
Si Iessu (Jesús), era producto de una inseminación artificial, el “ángel” que dice el evangelio “embarazó a su madre por la oreja” (según san Agustín, uno de los “padres” de la iglesia romana), habría sido más bien un “técnico en reproducción”.
Lo que en aquellos años, con pocos conocimientos genéticos, no hubo quien se tomara el trabajo de aclarar fue; ¿de quien era el semen? Obviamente tendría que ser humano pues el ADN de los ET, por razones obvias debe ser diferente al humano, nuestros primos hermanos los chimpancés son lo más parecido a nosotros (sólo hay diferencia de tres genes), sin embargo, los intentos soviéticos para crear híbridos simio/humanos fallaron por incompatibilidad (trataron con chimpancés, orangutanes y al parecer gorilas), el resultado fue un rotundo fracaso y papi Stalin canceló el proyecto…
Al parecer los científicos encargados cayeron en desgracia, lo cual era muy habitual en la Rusia soviética estaliniana, donde el “premio” por el fracaso podían ser unas vacaciones sin boleto de regreso, a la no tan soleada, Siberia.
Carros de los dioses y otras yerbas
Los suizos, famosos por sus bancos, quesos y montañas (también por sus chocolates aportados por México), han dado dos de los más célebres charlatanes helvéticos: Willie Maier y Erich von Däniken.
El ex camionero manco Maier hizo maquetas de “platos voladores de las Pléyades” y les tomó bonitas fotos mientras colgaban de hilitos, Jaime Maussan supo de él en la época que todos, incluyendo la mayoría de los creyentes, sabíamos de sus trucos, como y cuando se hicieron y, se aficionó tanto a él y sus rollos, que hasta la fecha es el único que defiende con ardor futbolero esas fotos de maquetas, que ni los “cazadores de ovnis” toman en cuenta y, eso que aquellos son de los más charlatanes.
El ex hotelero rollizo Däniken resultó mucho más famoso que Maier pues él publicó libros y, por lo menos de uno de ellos se hizo un documental. Erich tuvo un floreciente negocio organizando conferencias y viajes de turismo insólito y, le iba muy bien en esto último, hasta que reporteros de la revista alemana Stern (estrella), lo denunciaron como farsante, pues lo pescaron con las manos en la masa, o mejor dicho en las piedras, de Ica en Suramérica, “arreglando pruebas astroarqueológicas”.
Tortillas, pakal… todo es “extraterrestre”
Entre los garbanzos de a libra de Erich (le conocí y, entrevisté en los años 80 para Excélsior), se contó la puntada, mientras platicaba conmigo luego de la entrevista, de decir muy seriamente que las tortillas mexicanas eran como platos voladores…
La “astroarqueología” pretende que cualquier cosa que parezca plato, o parezca volar en pinturas y, mitología, “es prueba de visitantes ET en la antigüedad”.
En esta disparatada colección de interpretaciones colocan pintura medieval, a Pakal de Palenque, la Biblia, el Corán y una lista casi interminable pasando por Tassili y, las pinturas neolíticas.
Däniken se refirió a los maya de la manera más racista a lo nazi, cuando declaró (en una filmación de infelices mendigos y tullidos en el viejo Portal de Granos junto al mercado municipal de Mérida), que; ¿cómo era posible que esa “raza degenerada” hubiera sido capaz de crear la cultura maya? Una verdadera joyita herr Däniken.
Terminada la entrevista, me despedí de él diciéndole era la manera formal maya…, él quedó muy halagado por ello y, hasta apuntó lo que le dije (para alguno de sus libros, comentó), era un deseo de bienaventuranza, en realidad, era una robusta mentada de madre en maya yucateco…
Por lo del Portal de Granos.
Sociedad de antiguos astronautas
Los gringos que son famosos por hacer las cosas más absurdas, fundaron la en aquellos lares la Ancient Astronauts Society, la cual funciona como organismo de difusión de las últimas especulaciones sobre las “antiguas visitas ET”.
En realidad y, a juzgar por los programas del Canal de la Historia, no conocen nada nuevo sino sólo refritos de lo archiconocido y recontra demostrado sin tonterías: Ica, Nazca, Gizah, Palenque, etc., lo cual pudo llamar la atención hace 30 ó más años, pero que ahora sabemos perfectamente lo que paso o como se hizo.
La ciencia investiga para conocer, los charlatanes sólo repiten como loros su propia ignorancia…
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